La Fiscalía de Málaga y la acusación particular mantienen la acusación contra el sargento polilla, como se conoce al guardia civil implicado en el accidente ocurrido en junio de 2017 en la A-7 en Torremolinos, pero en el juicio en el Juzgado de lo Penal número 6 por otro siniestro ocurrido en mayo de 2014. Esta vista oral comenzó el 8 de octubre y ayer se celebró la segunda sesión en la que comparecieron varios testigos y un perito, tras lo que la Fiscalía y acusación que representa a dos víctimas mantienen la petición de pena; mientras la defensa añadió como alternativa a la absolución que de condenarse se aplique la atenuante de dilaciones indebidas y eximente. El siniestro ocurrió en mayo de 2014 en la carretera que une los municipios de Alhaurín el Grande y Fuengirola, por donde el acusado conducía un vehículo y chocó con un turismo y un ciclomotor. El accidente causó lesiones a tres personas, los conductores de ambos vehículos y un ocupante del coche. Según la Fiscalía, el agente ingirió «previamente tal cantidad de bebidas alcohólicas que le incapacitaba para el completo dominio de su vehículo» y a una velocidad excesiva. Añade, además, que se marchó del lugar del accidente para no someterse al test de alcoholemia.