Mijas ha cerrado el año 2018 con cerca de 200 millones de inversión urbanística en casi 2.500 expedientes de licencias de obra tramitados.

El edil de Urbanismo, Andrés Ruiz, realizó ayer un balance sobre el número de licencias de obra solicitadas el año pasado al Consistorio y que suponen una inversión urbanística en el municipio de cerca de 200 millones de euros. «Los expedientes tramitados ascienden a casi 2.500, de los cuales el 65 por ciento son obras menores y el 35 por ciento mayores. Dentro de esa segunda tanda hay proyectadas 700 viviendas nuevas en la localidad, símbolo de la confianza que genera este gobierno en los inversores», apuntó el concejal.

Ruiz añadió que todos estos datos desprenden «una mayor actividad de los pequeños y medianos empresarios, cifras que se ven reforzadas por el aumento de las licencias de apertura que van in creciendo en la localidad».

Teniendo en cuenta el valor total de las obras, en relación al 2017 el aumento en licencias de esta índole se sitúa en un 14 por ciento. «Esto es lo que permite que podamos elevar el gasto público en infraestructuras, políticas sociales o subvenciones, entre otras», señaló el concejal Andrés Ruiz, quien añadió que «estas cifras suponen continuar en el objetivo de satisfacer la demanda natural de la población para dar oferta suficiente a efectos de estabilizar los precios».

Según el edil, «Mijas es cada día una ciudad más atractiva para vivir donde el crecimiento se está haciendo de forma sostenible apostando por las áreas comunes y los espacios de esparcimiento sin llegar a agotarse la construcción de los inmuebles permitidos por el PGOU en el suelo».

En este sentido, según el concejal, en los últimos meses, en su departamento se está registrando un descenso de la densidad de viviendas pues las promotoras están apostando por complejos con menos unidades que buscan más la excelencia que masificar el ámbito y muchos de los modelos que se están llevando a cabo son boss house, con materiales más respetuosos con el medio ambiente.

Asimismo, el Ayuntamiento es cada vez más exigente con las mejoras en infraestructuras que se solicitan a la empresa constructora.