El Ayuntamiento de Torremolinos limitará a una jornada la estancia mínima de los vehículos que aparquen, de manera gratuita como hasta ahora, en alguna de las más de 300 plazas que se extienden alrededor del Centro Cultural Pablo Ruiz Picasso. Es la medida que persigue una nueva ordenanza vinculada a la regulación de un espacio público, «que cada vez era más usado por turistas para estacionar sus coches para toda una semana».

Aunque la medida se ha aprobado de forma inicial, «como ordenanza reguladora de los estacionamientos de superficie del Centro Cultural Pablo Ruiz Picasso», la idea es «poner fin al uso abusivo de algunos usuarios, no sólo a los del centro, que generalmente quitan sus coches a diario, sino de los residentes de la zona o visitantes que no los retiraban».

El Consistorio ha dado luz verde a la iniciativa con los votos a favor del PSOE, PP y Cs. «Era necesario porque ni siquiera la Policía Local tenía la autorización para que la grúa en determinados casos pudiera actuar», relatan fuentes del propio Ayuntamiento. «Es un uso indebido que a partir de ahora va a permitir que la grúa municipal pueda de madrugada retirar cualquier vehículo que siga estacionado indefinidamente», agregan.

La norma general no interferirá con el día a día de los usuarios de la Universidad Popular y de las actividades culturales que se organizan en las instalaciones contiguas. Y tampoco pretende impedir que las familias puedan acceder al recinto y aprovechar el horario estival, ampliado el pasado verano hasta las dos de la madrugada, para acceder al apartamiento y poder disfrutar de las actividades y de la oferta gastronómica del casco histórico torremolinense, como alegaron los integrantes del equipo de gobierno al presentarla: «Sólo se quiere evitar la saturación de las 320 plazas existentes, con ocho de movilidad reducida».