El alcalde de Estepona, José María García Urbano, seguirá otro mandato más sin cobrar un solo euro de sueldo del Ayuntamiento ya que mantiene su actividad como registrador de la propiedad fuera de la provincia de Málaga.

Así lo ha decidido el regidor con más apoyos de España en las últimas elecciones municipales. El alcalde lleva desde el año 2011 -en que accedió a la alcaldía de Estepona por primera vez- sin cobrar un euro, por lo que va a ahorrar casi un millón de euro a las arcas municipales, concretamente 971.000 euros, si se tiene en cuenta que su antecesor en el cargo, el socialista David Valadez, se fijó en 2008 unos emolumentos de 80.000 euros brutos anuales -y eso que Valadez se bajó un 20% el sueldo del exalcalde socialista Antonio Barrientos, que cobraba 97.000 euros-.

Así lo aprobará hoy el Ayuntamiento de Estepona en la sesión extraordinaria en la que se establecerán también las retribuciones del equipo de gobierno, compuesto por 21 concejales, cuyas nóminas supondrán un máximo de 717.000 euros anuales para las arcas municipales.

La cifra puede incluso ser inferior, en función de las dedicaciones parciales que se soliciten.

En cualquier caso, los grupos políticos y los concejales recibirán asignaciones por la asistencia a los órganos de la Corporación municipal. Los grupos municipales percibirán 500 euros mensuales, mientras que los ediles recibirán 300 euros por la asistencia al pleno y 30 euros por asistir a las comisiones informativas.

Por otra parte, el equipo de gobierno reducirá de 13 a 12 los cargos de confianza, aunque en principio sólo nombrará a ocho, con un coste máximo de 390.000 euros brutos anuales, frente a los 21 cargos que tenía el anterior gobierno socialista, con un gasto de 910.000 euros anuales.