Las formaciones regionales del Partido Popular y Ciudadnos han llegado este jueves a un acuerdo para repartirse la alcaldía de Mijas: dos años de gobierno cada formación. Aunque, tal y como informaba hoy La Opinión, el líder regional de Ciudadanos, Juan Marín, daba ayer por «seguro» que terminarán llegando a un acuerdo para la alcaldía de Mijas, pese a la enemistad entre los candidatos de sendas fuerzas políticas, Juan Carlos Maldonado y Ángel Nozal, respectivamente; la formación naranja da de plazo al PP hasta las 14.00 horas de este jueves.

"Estoy seguro de que habrá acuerdo, al igual que lo ha habido en Granada y en muchísimos otros municipios, porque no puede ser de otra forma, los ayuntamientos como el de Mijas tienen que estar funcionando, los políticos tenemos que dejar a un lado los intereses personales e incluso los del partido y pensar en los intereses de los ciudadanos», reiteró Marín.

Este viernes se celebrará el pleno en el que se elegirá al regidor mijeño. Pese al acuerdo regional y nacional de ambas formación, no es fácil encajar este pacto a nivel local, ya que según fuentes de Ciudadanos aseguran a este diario que Maldonado no está dispuesto a que el líder del PP local, Ángel Nozal, vuelva a ser alcalde, "pues tiene ocho causas judiciales abiertas y en cualquier momento le pueden abrir juicio oral".

Ciudadanos espera que el PP haga entrar en razón a Nozal para salvar el pacto pero el problema es que los integrantes del Partido Popular de Mijas han cerrado filas en torno a su líder. "Al PP le ha salido en Mijas un Pedro Fernández Montes" -en referencia al exalcalde del PP en Torremolinos-, afirman fuentes de Ciudadanos.

Y eso es, precisamente, lo que el PP quiere evitar, que Ángel Nozal se pueda transformar en otro Pedro Fernández Montes, que ha sido capaz de crear un partido nuevo que ha obtenido un solo edil pero con el que le ha arrebatado a Margarita del Cid la alcaldía que se había ganado, al ser el partido más votado en las urnas, y se la ha entregado al PSOE en connivencia con una exconcejal de Vox.

Fuentes del PP consultadas por este periódico no ocultan que a día de hoy Nozal se ha convertido en un problema para culminar el pacto y que el líder mijeño se ha enrocado en que no está dispuesto a ceder la alcaldía a Ciudadanos, y mucho menos a su enemigo Juan Carlos Maldonado, como ya hiciera tras las elecciones de 2015, cuando el PP obtuvo 11 ediles y Cs sólo 5.

Ahora, tras una nueva victoria del PP, con 9 ediles frente a 6 de Cs, Nozal no está dispuesto a ceder la alcaldía. En el partido le quieren hacer entender que para acceder a ella y formar un gobierno estable necesita 13 actas de concejales y para alcanzar esa suma el PP necesita a Cs, pero el partido naranja -que podría plantearse pactar con el PSOE si no cierra un acuerdo con el PP- no le quiere a él.