Ana María Peña, una vecina de Estepona que hace años perdió a su hijo como consecuencia de un infarto mientras practicaba su deporte favorito en la pista de skatepark del pabellón deportivo El Carmen, donó ayer un desfibrilador al Ayuntamiento de Estepona.

La teniente alcalde del área Sociocultural de Estepona, Begoña Ortiz, agradeció el gesto solidario de esta madre, «activa colaboradora del proyecto municipal Estepona, Ciudad Cardiosaludable, que entre otras actuaciones, está dotando de desfibriladores a todas las instalaciones públicas».

Ortiz explicó que para conseguir recaudar el dinero suficiente y adquirir este dispositivo, Ana María Peña se ha dedicado a confeccionar pulseras que iba vendiendo en eventos multitudinarios y en establecimientos colaboradores. La mujer, en total, ha conseguido vender un total de 1.165 pulseras.

La edil Begoña Ortiz agradeció «el gesto, el esfuerzo y el empeño de Ana María Peña por conseguir un objetivo tan noble y generoso con el municipio».

En los próximos días, el Ayuntamiento de Estepona estudiará el lugar adecuado para ubicar este nuevo dispositivo y se encargará de formar a personal municipal para su correcto manejo.

Begoña Ortiz anunció que en próximas fechas el Consistorio va a adquirir dos desfibriladores más que se pondrán en servicio en otros espacios públicos. Con el dispositivo entregado, Estepona cuenta ya con 16 que prestan servicio en distintas instalaciones municipales.

Plan

El Ayuntamiento comenzó en 2014 a instalar estos dispositivos en espacios como el polideportivo El Carmen, en el edificio Puertosol y en el Centro Cultural Padre Manuel. En 2017 se amplió el número de espacios cardioasegurados con la instalación de desfibriladores en todos los equipamientos deportivos de la ciudad y en los coches de la Policía Local que se encuentren realizando servicios de patrulla, ya que son los primeros en personarse en las zonas donde se recibe un aviso de parada cardíaca.

Además, se adquirió otro desfibrilador portátil que puede ser utilizado por personal municipal en eventos multitudinarios como ferias, conciertos o festivales. Recientemente, se han instalado otros dos en el nuevo Estadio de Atletismo y en la delegación municipal de Bienestar Social.

Por otra parte, todos los agentes de la Policía Local han sido formados para utilizar de forma correcta estos dispositivos. Además, en cada dependencia municipal hay también empleados responsables del uso de estos aparatos, en total alrededor de 200. Asimismo, este año el Ayuntamiento ha formado a todo el personal interesado para que puedan aprender a manejar estos sistemas que permiten estabilizar a los afectados mientras llegan los equipos sanitarios.

La instalación de estos desfibriladores asegura a los usuarios que estos espacios cumplen con todos los requisitos de seguridad. En caso de que sea necesario utilizar el aparato, este no reemplazará a los sanitarios sino que permitirá atender a la persona infartada o que presente algún problema de corazón mientras un médico y los servicios de emergencia llegan hasta el lugar.

La teniente alcalde de Estepona, Begoña Ortiz, destacó la importancia de contar con desfibriladores en estos edificios, comenzando por los edificios públicos. «Actuar de manera inmediata cuando se ha producido un infarto, mientras llegan los medios sanitarios, es primordial para salvar la vida a una persona», apostilló.

El Ayuntamiento de Estepona recordó que, gracias a estos dispositivos y a la rápida actuación de personal municipal y de los sanitarios, se pudo salvar la vida de una mujer y de un hombre que sufrieron una parada cardiorrespiratoria en los meses de enero y mayo.