La Policía Nacional ha detenido en Casares a un sicario de Ceuta huido de la justicia y que pertenecía a una organización criminal desarticulada en 2015 dedicada al narcotráfico y la extorsión, cuyos miembros habían protagonizado numerosos episodios violentos.

Según una nota de la Policía, en el marco de esta operación, los agentes han detenido también a otras dos personas relacionadas con el crimen organizado en Ceuta.

El motivo por el que se buscaba al ahora detenido se remonta a una investigación que se llevó a cabo durante la denominada "Operación Hacha", que se inició en 2014 para identificar a las organizaciones criminales de carácter violento asentadas en Ceuta y localizar a sus miembros, muchos de los cuales habían protagonizado incidentes graves con resultado de muerte o lesiones graves.

Los investigadores observaron que el origen de las acciones violentas que habían tenido lugar en Ceuta estaba relacionado con el narcotráfico y que se había generado una actividad añadida al tráfico de hachís, la extorsión, que se materializaba en exigencias de grandes cantidades de efectivo a quienes se dedicaban -o pretendían hacerlo- al tráfico de hachís, y hacían peligrar el monopolio ejercido por alguna organización.

Los agentes identificaron dos organizaciones criminales enfrentadas; la primera controlaba el narcotráfico en la ciudad desde mucho tiempo atrás y la segunda, con el objetivo de arrebatarle dicho control, inició numerosas acciones contra la primera, que se materializaron en tiroteos y culminaron con la muerte de su líder.

Entre 2013 y 2014 se produjeron varios episodios violentos, entre los que destacan el tiroteo a un vehículo y la realización de disparos intimidatorios al aire muy cerca de un establecimiento que la organización rival usaba como punto de distribución y otro hecho relevante fue el hallazgo de un coche incendiado en cuyo interior se encontraba el cadáver de un miembro de la banda contraria que, tal y como arrojó la investigación, habría muerto asesinado por un disparo en la cabeza y la familia señaló al ahora detenido como presunto autor material de la muerte.

Con la doble finalidad de eludir las pesquisas policiales y de evitar un posible ataque contra su integridad física como represalia, el arrestado se desplazó a la península y se ocultó en la ciudad de Granada, donde cambiaba continuamente de alojamiento.

Gracias a varios dispositivos policiales desarrollados en Granada, Alfacar (Granada) y Ceuta, los agentes detuvieron a varios miembros de la organización criminal investigada, entre los que se encontraban su líder y el socio de éste -presuntos autores intelectuales de los hechos violentos referidos-.

Finalmente, en agosto del presente año los agentes detuvieron en Casares a tres individuos relacionados con el crimen organizado en Ceuta, entre ellos a quien le constaba un orden de detención y se encontraba huido.