Utilizaba la darkweb, una red que permite el anonimato, y el pago con bitcoins para la venta online de hachís. Según la Policía Nacional era uno de los principales narcotraficantes especializados en la venta de drogas online. Desde su casa de Mijas vendía y distribuía la droga por todo el mundo. Fue detenido cuando se encontraba conectado en su propio domicilio, donde además se intervinieron muestras de hachís preparadas para su envío con un peso de dos kilos

Pese a la dificultad en investigar en la darkweb, que mantienen el secreto de las comunicaciones y su ubicación mediante la combinación de tres tecnologías -el sistema de navegación anónima (TOR), el cifrado de las comunicaciones (PGP) y sistema de pago con bitcoin-, la Policía inició la operación a principios de 2018. Se buscaban vendedores online que utilizan diferentes criptomercados para distribuir diferentes tipos de droga. Estos narcotraficantes se han especializado en la venta online de estupefacientes a través de la darkweb lo que dificulta su investigación y localización.

Ranking de los mejores vendedores

En el criptomercado, estos narcotraficantes cuentan con un sistema de calificaciones mediante el cual crean reputaciones, tanto de compradores como de vendedores, y un chat (IRC) con salas y foros de discusión para intercambio de información. Al visualizar el mercado se tiene acceso a un listado con la categorización de los productos, el ranking de ventas, la reputación o la novedad del producto, igualmente refleja el país del vendedor y se permite la compra solo a proveedores locales. Asimismo los usuarios requieren ciertos conocimientos tecnológicos y una planificación anticipada de las compras.

Gracias a la investigación se ha logrado la detención de uno de los vendedores online más activos de hachís. El arresto se ha realizado en su domicilio, ubicado en la localidad malagueña de Mijas, cuando se encontraba conectado a la darkweb. En el registro se ha localizado 2.000 gramos de hachís preparado para su distribución en paquetes de pequeños tamaños, dos ordenadores, un teléfono, sobres y material de embalaje, una envasadora al vacío y útiles de corte y pesaje.

La operación continúa abierta para la identificación y localización de más de 60 vendedores online que están siendo investigados desde comienzos del año pasado.