El profesor de las niñas que sufrieron graves quemaduras en la explosión registrada en el laboratorio de un colegio de Estepona en diciembre del año pasado prestará declaración ante la juez que investiga los hechos. Según ha podido saber este diario, está previsto que S.F.L. comparezca como investigado ante la responsable del Juzgado de Instrucción número 2 de Estepona a partir de las 12.00 horas de este miércoles a través de videoconferencia desde Vigo, ciudad en la que reside ahora. Este diario ha intentado sin éxito conocer a través del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) los delitos por los que se investiga al maestro de Ciencias, cuya declaración se ha retrasado hasta ahora tras no haberse celebrado por vía telemática el 9 de octubre. Según el padre de una de las menores, dos de ellas sufren graves secuelas por las que siguen recibiendo tratamiento.

Los hechos tuvieron lugar sobre las dos de la tarde del pasado 14 de diciembre en el colegio británico Mayfair International Academy. Tal y como publicó entonces este diario, la explosión provocó que cuatro niñas de 12 y 13 años que sufrieran quemaduras en el ámbito facial y fueron atendidas inicialmente en el Hospital Costa del Sol de Marbella, aunque finalmente fueron trasladadas a la capital con diferentes pronósticos. Según ha explicado a este periódico Juan Manuel Romero, su hija fue la que trasladaron en helicóptero para ingresarla directamente en la UCI del Materno Infantil por la gravedad de las lesiones y por los fallos respiratorios que le provocó la explosión. La paciente, que fue calificada gran quemada con un 10% de su superficie corporal afectada, principalmente la cara y un brazo, estuvo hasta seis semanas hospitalizada, recuerda Juan Manuel antes de añadir que ella y otra de las niñas siguen con tratamiento actualmente.

Romero cree que el profesor actuó con una gran imprudencia y asegura que, en base al testimonio de las niñas, la deflagración se produjo durante el experimento conocido como 'La serpiente del faraón'. Consideran que el maestro pudo añadir un exceso de alcohol a la mezcla de bicarbonato sódico, azúcar y arena. Antes de esta prueba, las chicas han declarado que realizaron otros experimentos que implicaban el uso de materiales peligrosos como fuego, gas butano y alcohol de quemar, como explotar con una cerilla un globo inflado con gas butano o coger burbujas de detergente con butano y prenderles fuego en las manos sin aplicar medidas de seguridad y sin ningún objetivo pedagógico.