El Ayuntamiento de Fuengirola indicó ayer que ha recurrido ante la Junta de Andalucía la propuesta de resolución «que no tiene en cuenta la verdadera realidad» del entorno de El Higuerón, alrededor de 75.000 metros cuadrados que el Consistorio de Benalmádena acaba de sumar a su territorio. El litigio seguirá así su curso tras décadas de incertidumbre sobre los límites de uno y otro término dentro de una de las urbanizaciones más exclusivas de la Costa del Sol.

En un comunicado, los dirigentes del Consistorio fuengiroleño alegaron que la zona «viene siendo regida y administrada desde hace ya décadas por el Ayuntamiento de Fuengirola». Alegan al mismo tiempo que en estos años el Consistorio vecino «no ha ejercido nunca competencias municipales de ningún tipo en la zona afectada. Ni urbanísticas, ni censales, ni tributarias, ni de ninguna otra índole».

Al respecto, la alcaldesa fuengiroleña, Ana Mula, matizó que a su juicio la propuesta de resolución carece de fundamentación en cuanto a lo que actualmente representa El Higuerón. Así ya se ha cursado, a través de los servicios municipales, la tramitación de un recurso de la modificación de límites elevada por la Junta. «El objetivo es el de defender los legítimos intereses de la ciudad en esta parte de su término, donde residen más de 200 fuengiroleños», alega el gobierno del PP en la localidad.

«Error administrativo»

El Ayuntamiento de Benalmádena, por su parte, recuerda que estos terrenos de El Higuerón le pertenecieron hasta que en 1981, con motivo de la redacción del primer Plan General de Ordenación Urbana, se quedaron fuera de sus jurisdicción debido a un «error administrativo». Para el alcalde benalmadense, el socialista Víctor Navas, no quiere decir que durante este tiempo hayan variado las lindes, «sino que a efectos urbanísticos los 74.000 metros cuadrados se habían quedado fuera del PGOU».

«No hubo alteración oficial que ante la Junta cambiase los límites entre uno y otro municipio. Es decir, esta parte de El Higuerón en las décadas sucesivas han seguido formando parte legítimamente de Benalmádena», abunda el regidor. Y en este sentido, varios integrantes de su propio equipo de gobierno se encargaron ayer de aplaudir la iniciativa «que en primera persona ha liderado Víctor Navas» para que el término benalmadense reclame lo que siempre «fue suyo».

Consideran que el arbitraje que ha establecido la Junta de Andalucía es contundente al darle al razón a Benalmádena, de manera que se repare un problema de lindes que se ha prolongado demasiado, «en parte por la falta de estabilidad política que ha padecido el Ayuntamiento», como también reconocían los ediles consultados.