Medio centenar de trabajadores de la empresa pública Samset de Torremolinos, que se encaga del mantenimiento de las aceras, los parques, la fontanería y electricidad, e incluso del servicio de grúa del municipio, se han manifestado esta mañana ante las puertas del Ayuntamiento para exigir medidas de seguridad frente a la pandemia del coronavirus.

Los trabajadores reivindican medidas de protección como mascarillas para hacer su trabajo con seguridad. Se quejan de que no tienen mascarillas y de que los guantes de látex que les han facilitado no son adecuados para sus puestos y se rompen con facilitad en cuanto comienzan a trabajar con la maquinaria que necesitan para hacer sus trabajos.

Así lo explica Antonio Gómez, del sindicato CSIF. "El sindicato no ha convocado la protesta ante el Ayuntamiento. Ha sido una concentración espontánea de los trabajadores que quieren que les apliquen los mismos criterios que a los trabajadores de limpieza o servicio operativos, a los que les facilitan mascarillas y les han reorganizado en servicio mínimos de 08.00 a 12.00 horas en turnos diarios de unos 10-15 trabajadores".

Antonio Gómez insiste en que la plantilla de samset, de unas 127 personas, está operativa y lista para trabajar: "No nos negamos a trabajar pero también tenemos miedo y queremos las mismas medias de seguridad y trabajar en servicios mínimos igual que los demás", afirma Antonio Gómez, quien asegura que el concejal Antonio Navarro se ha negado si quiera a cogerles el teléfono y a través del jefe de servicio "nos ha dicho que el que no quiera trabajar que se coja vacaciones".

Fuentes del Ayuntamiento de Torremolinos han respondido que los trabajadores disponen de los equipos de protección adecuados. "No es cierto que no tengan mascarillas. Tienes mascarillas, guantes y equipos de protección individual desde el primer día", afirman fuentes del equipo de gobierno.

"Se eliminó la huella digital para evitar contagios y se está desinfectando cada día todos los equipos que utilizan, incluidos los vehículos. No es cierto que se les ha ya pedido que se cojan vacaciones y, evidentemente, tienen que trabajar todos estos días porque forman parte de los servicios mínimos que necesita la ciudad", afirman las fuentes municipales.

Una quincena de policías han disuelto la protesta de los trabajadores ante las puertas del Ayuntamiento, bajo amenaza de multa. Los trabajadores se mantienen concentrados en la nave donde guardan las herramientas y el material de trabajo, a la espera de una solución.