Torremolinos creará zonas de bajas emisiones en el municipio

El Ayuntamiento de Torremolinos ha iniciado el proceso para la creación de zonas de bajas emisiones en el centro histórico, siguiendo las directrices europeas para las ciudades de más de 50.000 habitantes.

El objetivo es hacer centros históricos más habitables en los que el coche no sea el protagonista, que haya aparcamientos disuasorios y el fomento del transporte público. «La única forma de conseguirlo es junto a los colectivos de la ciudad crear un diseño en el que todos participemos. Ese trabajo ya ha comenzado en el Ayuntamiento de Torremolinos para que nuestro centro sea cada vez más habitable, que esté libre de ruidos y en el que podamos vivir mucho mejor», según explicó ayer la alcaldesa de la ciudad, Margarita del Cid.

La creación de una zona de baja emisión requiere una serie de actuaciones de mejor gestión del tráfico y de creación de infraestructuras paralelas para que sea más fácil moverse por el centro sin tener que recurrir al vehículo privado. Crear una zona de estas características supone además prohibir el acceso a las zonas céntricas de la ciudad de aquellos vehículos que sean más contaminantes.

El proceso participativo para ello abarca cuatro fases: planificación, diseño operativo, puesta en marcha y seguimiento.

Ayer se constituyó la mesa de seguimiento que coordinará las actuaciones necesarias para crear estas zonas. En la primera reunión de la comisión de participación ciudadana hubo una primera aportación de ideas tras la que se va a continuar trabajando para que la zona de bajas emisiones sea una realidad lo antes posible y que Torremolinos sea cada vez una ciudad más amigable, más verde, más respetuosa con el medio ambiente.

A su vez se ha habilitado un link para que los ciudadanos puedan manifestar sus ideas o aportaciones por medio de una encuesta on line a través de la dirección de internet: https://encuesta.com/s/iIyKTk3eEEXqt8-4JOdhuw/

Estas actuaciones se enmarcan dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que financia la Unión Europea mediante los fondos Next Generation.

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