El consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Paulino Plata, clausuró ayer la segunda semana de los Cursos de Verano de Ronda. El consejero quiso hacer un llamamiento a las administraciones públicas para «conservar y poner en valor» el patrimonio histórico y cultural. Además, manifestó que este legado representa una fuente de «diversidad y riqueza» importante en una época en la que la globalización hace que la cultura en las diferentes regiones del mundo «son cada vez más homogéneas».

Plata, al que acompañó el delegado provincial de Cultura, Manuel García, afirmó que el patrimonio es, además, una fuente de riqueza económica, ya que gran parte del turismo de Andalucía se debe precisamente a este legado. En este sentido, afirmó que «de los 25 millones de turistas que nos visitan, 7 millones lo hacen por nuestra oferta cultural».

Dentro de las iniciativas encaminadas a potenciar la cultura, el consejero anunció que el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico promoverá nuevas líneas de investigación y contribuirá a la formación de profesionales «de alto nivel» relacionados con este ámbito. En este mismo sentido, también alabó la labor llevada a cabo por el Ayuntamiento de Ronda en la restauración de la iglesia del antiguo Convento de Santo Domingo, lugar donde se celebró el acto de clausura y que sirve de sede a los cursos.

El flamenco también ocupa un lugar destacado dentro de nuestro legado cultural, según el consejero, y por eso afirmó que desde la Junta se está llevando a cabo una «dura batalla» para preservarlo, en referencia a la campaña iniciada para que este estilo se convierta en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

En relación a los Cursos de Verano, señaló que los organizados en Ronda ocupan «un lugar privilegiado» entre los nacionales.

Por su parte, Enrique Baena, director académico de los cursos de Ronda, aseguró que «debemos sentirnos orgullosos» porque en esta ciudad se celebren estos cursos, que suponen un «lugar de reflexión y debate que hay que potenciar en estos tiempos».