La Feria del Libro de Málaga quiere reinventarse. En su 46º edición lo hará de la forma más clásica, traer el espíritu de Miguel de Cervantes y 'El Quijote'. Desde el 29 de abril hasta el 8 de mayo llevará a cabo la tarea ofreciendo un amplio abanico de actividades que se desarrollarán en múltiples espacios: el Palmeral de las Sorpresas, donde se ubicarán las clásicas casetas, el Instituto de Estudios Portuarios, el Rectorado de la Universidad de Málaga, la Sala Iniciarte y el escenario de El Arsenal.

Todas ellas serán para revivir a Cervantes. Un sentido que se cubrirá desde exposiciones, como "El Quijote en Málaga", debates como "Cervantes VS Shakespeare" o el mapa interactivo de 200 metros cuadrados que se encontrará junto al Centre Pompidou, donde el visitante podrá pasear por todas las localizaciones de la obra del escritor en Andalucía, rescatando vídeos, fotografías y textos. Además se realizarán las tradicionales presentaciones y firmas de escritores así como encuentros con autores, entre los que ya figuran Luis García Montero, Silvia Grijalba, Juan Serrano o la bloquera 'Isasaweis'.

La presentación contó con la presencia de la concejala de Cultura, Gemma del Corral, la delegada de Educación y Cultura de la Junta de Andalucía, Monsalud Bautista, la Jefa de Servicio de Ducumentación de la Universidad de Málaga, Rosario Moreno, y la directora del evento Ana Cabello. El presupuesto general de la Feria será de 40.000 euros, el mismo que el pasado año, que no registra las dotaciones económicas de los colaboradores. En esta edición volverá a faltar la presencia de librerías emblema de la ciudad por falta de rentabilidad, una acusación en la que la organización aseguró seguir trabajando.