­Maggie Civantos confiesa que aprende de la vida cada vez que se sube al escenario. Asegura que hay cosas que solo consigue la experiencia y ella crece con cada personaje. Aún le quedan muchos sueños por cumplir, pero prefiere no preocuparse por el devenir y disfrutar el presente. Este viernes y sábado estará en el Teatro Cervantes con 'Una gata sobre un tejado de zinc caliente', montaje dirigido por Amelia Ochandiano cuyo reparto completan Juan Diego, Eloy Azorín, José Luis Patiño, Marta Molina y Ana Marzoa. La malagueña, además, comparte nombre con el mítico personaje de Tennesse Williams, la gata Maggie.

Esta obra fue protagonizada en la gran pantalla por Liz Taylor y Paul Newman. ¿Cómo ha sido el proceso de ponerse en el papel de Maggie?

Estuvimos ensayando alrededor de once semanas y tuve bastante tiempo para preparar el papel. Pero en aquel momento yo estaba también con un proyecto de televisión, por lo que ha sido todo un poco estresante. Ha sido un trabajo duro pero ahora solo quiero disfrutar de la función que está todavía en sus inicios. Hasta que no trabajas con el público el personaje no se asienta. Y ahora empiezo a sentirme más libre en escena.

¿Cómo se siente ante la idea de representar esta obra en Málaga?

Estoy deseando estar en Málaga y retroalimentarme del público de mi ciudad. Siempre he soñado con verme en el Teatro Cervantes y ahora se juntan muchas cosas. Por un lado, el personaje de Maggie era muy deseado porque lo trabajé cuando estudiaba Arte Dramático y siempre quise saber más de él. Por otro lado, el hecho de hacerlo en el Cervantes es muy especial para mí porque yo he visto muchos años el Festival de Teatro. De repente, estar programada donde me he visualizado tantas veces es muy bonito al margen de que, además, estaré muy arropada por mi familia y amigos. Será un día muy especial.

Trabaja con actores veteranos como Juan Diego o Ana Marzoa. ¿Qué ha aprendido de ellos?

He aprendido la seguridad y templanza que tienen en escena y la confianza que tienen en su trabajo, incluso sin tenerla. Estoy segura de que, como actores, a la hora de interpretar personajes tan complejos nadie tiene la seguridad de estar haciéndolo bien. Pero en ellos he observado que está la seguridad del paso del tiempo y de las tablas. También he aprendido que hay cosas que no se pueden enseñar y que se aprenden con la vida y los años. Sueñocon que la vida me dé la oportunidad de desarrollar mi carrera como la han desarrollado ellos.

Decía que actuar en su tierra con esta obra es un sueño cumplido. ¿Qué otros sueños le quedan por cumplir?

Tengo muchos deseos, como hacer comedia, encarnar muchos tipos de personajes o viajar por el mundo, pero lo cierto es que intento centrarme en mi día a día y vivir. Creo que a veces nos centramos mucho en soñar y en proyectar fuera cuando lo que tenemos que hacer es vivir el presente. Por supuesto que me quedan muchos sueños por cumplir pero ahora mismo estoy disfrutando este sueño que ya he cumplido.

Maggie es un personaje complejo, ¿qué es lo que más le sorprende de su personalidad?

Los actores tenemos la suerte de aprender de la vida a través de los personajes y de las diferentes personalidades que existen. Lo que más me gusta de Maggie es el sentido del humor que tiene y su fuerza, a pesar de que es muy vulnerable. Ella no deja de luchar nunca; es una gata que no deja de maullar. Cada vez que la interpreto descubro algo nuevo de ella y creo que eso es lo bonito.

El sábado se celebra la gala de los Goya, en la que, como ha confesado Rovira, no se escucharán menciones políticas. ¿Qué piensa al respecto?

Es una decisión personal. Nosotros como actores no tenemos la obligación de estar en política. Con nuestro trabajo podemos hacer pensar, reflexionar...,pero no tenemos por qué meternos en eso. Está en su derecho.