A estas alturas, todos sabemos cómo se las gasta el mutante de las garras de adamántium, uno de los personajes más carismáticos de los X-Men y el más explotado por el cine. Poco a poco, los lectores de sus historietas y los espectadores de sus películas han ido conociendo los orígenes de Logan, las razones de su carácter y sus múltiples conflictos personales. Pero a comienzos de los años ochenta, Lobi no era más que un miembro más de los X-Men.

Tras su primera aparición en la serie del Increíble Hulk, en 1974, y su posterior inclusión en el grupo de mutantes liderado por el profesor Charles Xavier, Wolverine comenzó a despuntar gracias a la gran intuición y maestría del guionista Chris Claremont, quien encabezó el relanzamiento de los mutantes, una serie de la que Marvel no había sacado, hasta la fecha, muchos beneficios. Pero todo cambió con Claremont y su alianza con el dibujante Frank Miller, que comenzaba a destacar gracias a su exquisito trabajo realizado en Daredevil.

De camino en coche a una de las ediciones de la Comic-Con de San Diego, ambos genios de las viñetas decidieron que Lobezno merecía ser más que un tipo primitivo y descontrolado capaz de despellejar con sus garras retráctiles a cualquiera que se le pusiera por delante, ya fuese amigo o enemigo. Así nació, en 1982, la primera serie protagonizada en solitario por el peludo Wolverine, recopilada por Panini Comics en este volumen titulado Honor y que contiene los cuatro números con los que Claremont y Miller transformaron al psicópata carnicero de Lobi en un personaje mucho más profundo.

Este clásico, presentado en tapa dura con encuadernación holandesa, lo es por dos motivos fundamentales: la impresionante creatividad gráfica, marca inconfundible de Miller, y la propia historia. Lobezno acude a Japón en busca de su amada Mariko Yashida, que ha dejado de responder a sus cartas. Allí se encontrará con las férreas tradiciones niponas, que han abocado a Yashida a un matrimonio forzado, y a la despiadada Yakuza japonesa, que pone en marcha a todo su ejército de ninjas con el fin de desbaratar las intenciones de Lobezno.

Lobezno. Honor es sin lugar a dudas una de las piezas fundamentales, sino la más, en la vida editorial de este personaje. Ya que gracias a esta serie, Wolverine es hoy el superhéroe que todos conocemos.