La imponente presencia de Thor en las páginas de Marvel fue cobrando protagonismo desde su primera aparición en Journey Into Mistery #83, en junio de 1962, hasta protagonizar su propia colección a partir de 1965, cuando Stan Lee decidió que Journey Into Mistery pasase a titularse The Mighty Thor (El poderoso Thor). En este momento, el Dios del Trueno comenzó a desplegar todo su potencial. Pero aunque el hijo de Odín ya era admirado ampliamente por ser miembro fundador de Los Vengadores y el único de los héroes capaces de recorrer el infinito universo para defender a la Tierra de las amenazas extraterrestres, el personaje tendría que esperar hasta 1969 para experimentar la desbordante creatividad de Lee y Jack Kirby tanto en su línea argumental como en su aspecto gráfico.

Una vez solucionado el conflicto del doctor Donald Blake, usado por Odín para hacer que su hijo aprendiese las debilidades y virtudes humanas y así convertirse en digno de su deidad, el poderoso Thor fue por fin consciente de su identidad. Llegados a este punto, el tándem creativo más rentable de Marvel se propuso explorar la interacción de los grandes titanes creados para el universo de la compañía, tales como Galactus, que ya había aparecido con anterioridad en Los Cuatro Fantásticos, y Ego, así como los villanos Jefe de Pista, Ulik o el infatigable hermanastro Loki.

Este volumen, que atestigua los últimos trabajos del equipo formado por Lee y Kirby respecto al personaje de Asgard, arranca con la inesperada visita a la Tierra de una colonizadora del planeta Rigel que suplica a Thor para que le ayude a combatir a Galactus, el devorador de planetas. El Dios del Trueno irrumpe en mitad de una batalla cósmica que libran Galactus y Ego, el planeta viviente. Thor, gracias al poder de su martillo, consigue que el temible devorador de planetas retroceda, aunque éste será solo el inicio de una aventura que volverá a enfrentarlos. Seguidamente, el hijo de Odín sucumbe a la locura del guerrero contra Él, que había secuestrado a su amada Sif, y como castigo ante tan indigno comportamiento, su padre le obliga a ir en busca de Galactus sin más demora.

Odín teme que el creciente poder del devorador de planetas ponga en peligro la existencia de Asgard y confía en que Thor ponga fin a esta amenaza. En este episodio (The Mighty Thor #168), los lectores son testigos del origen del malvado personaje, cuya vida se sostiene en la aniquilación de mundos. Además de estas historias, repletas de viajes galácticos, naves espaciales y estrambóticos seres que habitan el cosmos, las páginas de este Omnigold también ofrecen una inigualable perspectiva de la evolución de la maestría de Jack Kirby como dibujante, capaz de hacer visibles la inmensidad del universo y el poder de las energías cósmicas a través de majestuosas tiras repletas de fuerza e imaginación gráfica. El volumen, de más de 500 páginas, prosigue con los legendarios episodios dibujados por Neal Adams y la llegada a la colección de John Buscema.

La era de la bomba loca

Capitán América y El Halcón 6Jack Kirby, Panini ComicsCapitán América y El Halcón 6

Después de iniciar su segunda vida en Marvel a través de la colección de Los Cuatro Fantásticos en 1962 y cimentar su regreso dos años más tarde como miembro fundador y líder de Los Vengadores, el Centinela de la Libertad redefinió su protagonismo en las viñetas de la compañía. Pero la llegada de los años setenta vino a causar un doble impacto en sus historias, que por un lado se contagiaron de la realidad social de su país, avergonzado por la guerra de Vietnam y el caso Watergate, que significó la dimisión del presidente Nixon, y por otro vio como su creador cambiaba las oficinas Marvel por las de la competencia, la editorial DC.

En 1975, Kirby decidió regresar a La Casa de las Ideas y volver a imprimir optimismo y vitalidad a las aventuras del Capitán América firmando la trepidante Saga de la Bomba Loca, en la que presenta a una sociedad sometida por los efectos de un artefacto misterioso. Pero el enemigo que el Capitán América y su socio el Halcón persiguen no procede de un planeta exterior, se trata de una secta de aristócratas llamada La Élite cuyo propósito es esclavizar a la población. Esta colección, que se creó con la idea de celebrar el Bicentenario de la Independencia de los Estados Unidos, cuenta también con un especial, Las batallas del Bicentenario, en el que Capi viaja por distintas épocas de la historia norteamericana, desde el lejano oeste al gran incendio de Chicago, pasando por el enfrentamiento civil por la abolición de la esclavitud, para empaparse del verdadero espíritu de la tierra de las barras y estrellas. Este viaje lo provoca un misterioso Buda cuyo fin es hacer que el Capi adquiera una idea general de la historia de su país.

En su encomiable labor por recuperar la etapa clásica de los cómics de Marvel, y coincidiendo con el centenario del nacimiento del dibujante de Brooklyn, Panini edita uno de los trabajos más personales del ‘rey’ de los cómics. Este Omnigold es un ejemplo imprescindible para conocer la dimensión que el ‘rey’ imprimió al Centinela de la Libertad, haciendo, además, que los conflictos de la sociedad de su época se viesen reflejados en las tramas y personajes. Un volumen repleto de acción y prodigio artístico que ningún aficionado debería dejar pasar.