El consejero de Cultura, Miguel Ángel Vázquez, aseguró ayer que «todo el mundo sabía» que detrás de los mosaicos del artista Invader, colocados en varios edificios del centro de Málaga capital, «había una iniciativa de índole municipal» y ha lamentado que en este asunto el Ayuntamiento «no ha sido el garante de la tutela del patrimonio histórico». Así, cuestionado por la querella que ha presentado la Fiscalía de Medio Ambiente contra el artista y el director del Centro de Arte Contemporáneo (CAC), Fernando Francés, por un delito contra el patrimonio por la colocación de dichas obras, Vázquez aseguró que «el tiempo nos ha acabado dando la razón a la Junta de Andalucía».

En este sentido, ha recordado que desde el Gobierno andaluz han hecho tres requerimientos por vía administrativa al Ayuntamiento para que retirara los mosaicos, «fundamentalmente en los dos que estaban en Bienes de Interés Cultural (BIC), pero también otros que estaban en el Conjunto Histórico Artístico del Centro de Málaga, que tiene una especial protección». El consejero de Cultura señaló que durante este tiempo «hemos visto cómo el Ayuntamiento se ha hecho el remolón, ha seguido dándole largas a un asunto», apuntando que «ha tenido que ser la Fiscalía de Medio Ambiente la que tome cartas en el asunto» y la que «le ha obligado a cumplir con sus obligaciones».

Así, incidió en que el Ayuntamiento «no ha sido el garante que debería ser de la tutela del patrimonio histórico de Málaga y desde luego la Fiscalía le ha sacado una tarjeta amarilla y le ha obligado a hacer lo que tenía que hacer desde el principio». obre la supuesta vinculación del director del CAC, indicó que habrá que esperar a ver cómo acaba ese procedimiento judicial, aunque ha apuntado que «en cualquier caso todo el mundo sabía que detrás de esos mosaicos había una iniciativa de índole municipal, que era el Ayuntamiento quien estaba detrás». Por lo que, el consejero ha dicho que «es el Ayuntamiento el que tiene que dar la cara, en primer lugar cumpliendo sus obligaciones y en segundo, siendo el garante de la tutela del patrimonio histórico de Málaga».

El Seprona de la Guardia Civil ha llevado a cabo una investigación, y la Fiscalía de Málaga ha presentado una querella contra el artista y contra Francés por un posible delito sobre el patrimonio histórico por la colocación de 15 mosaicos en diversos edificios del conjunto histórico de la capital, incluido en el catálogo general del Patrimonio Histórico Andaluz.