Into The Valley es un festival de música electrónica muy singular, con muchos extras. Fue creado en Suecia hace tres años por una promotora «con más de 20 años dedicados a la cultura de club». ¿El objetivo? Desarrollar un festival boutique, selecto y con personalidad, y fortalecer la escena internacional del techno y sus derivados. «Trabajamos duro para encontrar emplazamientos verdaderamente únicos a lo largo y ancho del mundo. Nuestra primera edición se celebró en una cantera y la segunda, en una prisión rusa de los tiempos de la Guerra Fría», aseguran los responsables de la cita. Pues bien, su tercera convocatoria tendrá lugar en el Castillo Sohail, de Fuengirola, del 28 al 30 de septiembre, y presenta un cartel realmente impresionante, imprescindible para los aficionados a la electrónica, con Floating Points, Larry Heard (Mr Fingers) y Omar-S como nombres más populares.

Heard es uno de los padrinos del house en su vertiente más ascética y emocional. Su himno Can you feel it, por ejemplo, condensa buena parte de su música, serena, de arquitectura exquisita. A sus casi 60 años, el de Chicago es una leyenda viva de la electrónica, y sus sesiones son invitaciones al baile extático y lecciones magistrales.

Floating Points bien podría ser su heredero: si Larry Heard es programador informático, el británico Sam Shepherd es neurocientífico de día y DJ y productor de noche, con una música que transita por el house, el hip-hop, el techno, el jazz y el dubstep de una manera natural.

Y luego está Omar-S, para muchos, el mejor representante del nuevo sonido de Detroit, la ciudad del motor en la que nacieron y crecieron pioneros del techno como Derrick May y Kevin Saunderson. Una buena definición de su sonido la ofrecieron hace unos años en la sacrosanta web Resident Advisor: «Usando sintetizadores de la vieja escuela y máquinas de ritmo para desarrollar un feeling de funk mecánico, Omar-S se las ha apañado para enseñarnos el futuro llevándonos al pasado».

Hay muchos más artistas en la nómina del Into The Valley de Fuengirola: Acid Pauli, Anastasia Kristensen, Charlotte Bendiks, Amelie Lens, Elena Colombi, DJ Rada, Emmi Friberg, DJ Seinfeld, Hunee, Heidi Lawden, Schatrax, Natasha Diggs... Como pueden comprobar, muchas mujeres en la cabina, avalando que ellas, las herederas de pioneras en un mundo de hombres como Ellen Allien, están marcando el tempo de la electrónica.

Pero Into The Valley es mucho más: la organización no empaqueta su festival y lo implanta en la localización que elige cada año, sino que muchos de sus contenidos se apoyan en lo mejor de la región determinada, seleccionando sus productos y talentos propios para redondear lo que, consideran, «una experiencia inmersiva»: los scouts del festival visitan la zona donde se realizará en busca de productores y DJS hasta chefs y restauradores para que los asistentes aprovechen al máximo las bondades del lugar. Por cierto, que esto no es una bacanal: en este festival hay una política de tolerancia cero con las drogas y hasta instalan carpas para que quien lo desee practique yoga y meditación. Más información en www.intothevalley.com.