Tengo entendido que decidisteis formar el grupo después de un concierto que dieron Perro, Belako y Sierra en Madrid. ¿Qué rayo cegador se apoderó de vosotros?¿No habíais tocado antes en grupos?
Fuimos cegados por la envidia, en el mejor de los sentidos. Ver a gente de nuestra edad más o menos hacer algo que nos molaba tanto nos llevó a decir: ¿Y por qué no podemos hacer lo mismo nosotros?
Tal y como van las cosas, ¿habéis pensado en profesionalizaros o seguís de indies?
Vamos a seguir haciendo canciones y trabajando como lo venimos haciendo. Ahora nos implicamos más porque salen muchos bolos y estamos trabajando en el disco, pero eso no va a cambiar la forma de trabajar. Somos un poco reacios a la profesionalización en tanto que nuestro compromiso es con este proyecto y no con la música (a excepción de Juan [el batería]). Cada uno tiene sus proyectos fuera de la música y no vamos a dejarlos.
Muchos medios y gente de la industria habla de vosotros como el futuro. ¿Sentís presión?
Ninguna. Las expectativas de la gente no son algo que podamos controlar.
Hay una comparación que no cesa: la de «son los nuevos Nikis ». ¿Os halaga, os preocupa?
Hombre, nos flipan Los Nikis, así que el que nos comparen con ellos nos hace ilusión. Ahora bien, no creemos ser los nuevos Nikis, tenemos muchas más influencias que nos alejan de ese sonido.
¿La de los hermanos menores de Triángulo de Amor Bizarro os iría mejor?
Un poco lo mismo. Para nosotros Triángulo de Amor Bizarro es una referencia inmensa, pero seríamos hermanos de esos que se dan un aire cuando sonríen y se meten el uno con el otro diciéndose que son adoptados.
Alguna conexión con la Movida Madrileña? ¿Cuánto de Madrid (o de Malasaña) hay en vuestra propuesta?
Hay mucho de Madrid en las canciones, porque al final Diego [vocalista] escribe sobre lo que vive, cosas que ve, que piensa y que le pasan. También tenemos muchas influencias de grupos de la Movida, y eso se refleja en nuestra forma de componer y escribir.
En las fiestas de San Isidro os juntasteis dos generaciones de rock madrileño: Burning y vosotros. ¿Cómo fue? ¿Qué tal os sentisteis?
La verdad es que ese concierto fue muy bonito, y salió todo muy bien. Fue un jodido subidón tocar en las fiestas de San Isidro.
Un día salis en Vanity Fair yotro en una lista de Rock y Birras. ¿De quién sois, como dirían No me pises que llevo chanclas?
No sabría decirte... La peña se quedó loca con Cayetano.
¿A vosotros os escuchan los seguidores de Taburete? ¿Os gustaría que os respondiera el beef Morat o Taburete en alguna de sus canciones?
Alguna hay...
Muchos de los haters, o incluso algunos que no lo son, dijeron que cuando salió Cayetano era un rollo «pijos hablando de pijos». ¿Cómo os lo tomáis?
Nos lo tomamos a risa. Al final el videoclip nos muestra a nosotros mismos representando el papel de cayetanazos, y que piensen que ese es nuestro día a día nos da igual, no nos afecta de ningún modo. También te digo: Ojalá tener esa chocita...
El año pasado vosotros ibais a los festivales, y ahora os llaman. ¿Cómo lleváis el cambio?
Pues genial; de pagar por ir como público a festivales a que te paguen por tocar en ellos… ¿Cómo lo vamos a llevar?
«Todos mis amigos se llaman Cayetano / no votan al PP, votan a Ciudadanos». ¿Esto es visionario o puro análisis político? ¿Se han molestado en Ciudadanos?
El otro día hablamos con Albert [Rivera] y nos dijo que estaba súper molesto… A Inés [Arrimadas] le hacía más gracia el asunto.
¿Qué significa Carolina Durante y de dónde surge?
Es el nombre de la protagonista de una película gore de serie B de los ochenta. La tipa se llamaba Caroline Menwell, que sonaba algo así como a meanwhile, y lo tradujimos como Durante.
