El término de la temporada de conciertos pasada, que coincidió con el interesantísimo programa de la Academia Orquestal de Málaga y que contó con la presencia en el escenario de la Sala María Cristina del violín de Jesús Reina, cerraba meses de grandes e interesantes conciertos (sinfónicos, cámara, recitales líricos?) que reclaman cierta atención dado el alto nivel técnico detectado que de alguna forma merecen una atención más cuidada y porqué no una invitación a seguir y apoyar las distintas formaciones que lejos de hacer sombra a la programación de la Filarmónica de Málaga amplían el horizonte en propuestas, variedad y contenidos relacionados con la música clásica.

Lejos de casualidades la actividad concertística en la ciudad ha crecido con denodado esfuerzo al margen de la apuesta por lo cultural como estrategia de ciudad puro postureo que no va más allá de las salas de exposiciones y que da la espalda al verdadero hervidero creativo que florece en Málaga. En el caso de la gran música - damnificada en esta estrategia- este crecimiento se relaciona con el esfuerzo de un puñado de docentes de los conservatorios medios y superior de Málaga que hacen posible esta realidad, el esfuerzo de conjuntos como Concerto Málaga o el empuje de la propia Sociedad Filarmónica que se resiste a ser engullida por la oficialidad. Se hace necesaria esta visibilidad como elemento generador de cultura y germen esa esa gran escuela de música que se está cocinando.

La más madrugadora de estas formaciones, a la que hacemos referencia, ha sido la Academia Orquestal que cerraba la temporada pasada y dan el pistoletazo de salida a las grandes citas el pasado siete de septiembre con el mismo éxito de público que el pasado Julio. A este primer concierto en el Neville le van a suceder tres programas más de aquí a julio próximo. El primero de ellos en diciembre que reunirá en el escenario a los profesores Mario Navas y Manuel Moreno para la Sinfonía Concertante K. 364 de Mozart. A mediados marzo Haydn y Mozart ocupan el cartel que compartirán profesores y alumnos de la Academia. Y llegados a finales julio la Sinfonía Fantástica de Berlioz pondrá término a la primera programación de su segunda promoción con la mirada puesta en septiembre que contará con la colaboración del barítono malagueño Carlos Álvarez.

El homenaje a la figura de Jesús López Cobos abren los primeros encuentros de la Joven Orquesta Provincial de Málaga que entre octubre y diciembre abordarán cinco grandes encuentros. La Novena de Beethoven inaugurará su temporada el próximo dos de octubre en el Teatro Cervantes junto a la Coral Alminares de Nerja y la Coral Santa María de la Victoria. Sin salir de octubre desarrollarán un concierto centrado en la lírica aunque el escenario se traslada desde la ciudad hasta Torrox. Para el nueve de diciembre en el Centro Cultural María Victoria Atencia está previsto el concierto de Navidad de esta formación que contará como en todos los programas citados la participación de la orquesta escuela de la JOPMA. En la mesa y a la espera de concretar fechas y escenarios quedan pendientes la Misa de la Coronación de Mozart e incluso el Stabat Mater de Rossini.

Con las maletas cargadas de premios internacionales, este pasado verano, el Proyecto Orquestal Promúsica enfila su quinta temporada bajo el sugerente título Encantados con la música que atesora ocho grandes propuestas que van desde los grandes musicales, bien entrado octubre hasta la celebración del Día Europeo de la Música que cerrará su programación a mediados de junio. Entre todas estas sugerencias destacan el programa de Navidad que contará con la participación de la Coral Santa María de la Victoria. A comienzos de febrero Piazzolla y sus Cuatro Estaciones volverán en versión de orquesta de cámara. En marzo la familia Bach nos acercarán páginas imprescindible del gran repertorio barroco con Juan Sebastián como excusa. Mozart misterioso y brillante titula el monográfico que Promúsica dedicará al genio de Salzburgo. La formación que dirige Javier Claudio cerró la temporada pasada con cinco llenos en su sede en la Sala María Cristina y el conjunto se marca como reto superar esta marca.

Como prólogo a la temporada de conciertos de Málaga Camerata, su director artístico Santiago Otero subirá al podio de la formación el próximo veintisiete y veintiocho de octubre en el Teatro Cánovas junto a la compañía malagueña Teatro del Arte para dirigir la ópera Bastien und Bastienne de W. A. Mozart. El primero de los programas llegará entrado noviembre con el estreno de Nocturno Onírico del compositor Ángel Hernández. El programa de Navidad incluirá la recuperación del Laudate Dominum de Eduardo Ocón recientemente descubierto en el fondo histórico del Conservatorio Superior de Música de Málaga gracias al trabajo de edición y transcripción del profesor José David Guillén Monje. Santiago Otero y Málaga Camerata irán desgranando a lo largo de esta y varias temporadas todo este yacimiento musical que ahonda en la figura del compositor malagueño. Para el último concierto de los cinco programados por Málaga Camerata nos reserva, el diez de mayo, el Concierto para clarinete y orquesta en La mayor de Mozart y tras el descanso la Sexta Sinfonía Pastoral de Beethoven.

Septiembre comenzaba con la noticia de la inminente construcción del centro-auditorio que Concerto Málaga tiene planeado construir en Teatinos y que muy posiblemente vea sus primeros resultados a finales del año próximo. Veintidós años de trabajo al más alto nivel, varios discos a las espaldas y una temporada que se complementa varias giras por distintos países europeos conforman la carta de presentación para la temporada que comienza. Encuadrada dentro de la Fundación Hispania Música su decidido carácter internacional no los aleja del interés por la interpretación, investigación y enseñanza de la música de cámara y especialmente aquella producida en la península sin olvidar iberoamérica. Reflejo de este interés es el ciclo Las Cuatro Estaciones que seguirá ahondando en la fina línea entre la excelencia y el acercamiento a nuevos públicos, otro de los pilares que centran la atención del conjunto y su concertino José Manuel Gil de Gálvez.

Efeméride

Esta temporada viene marcada también por una felicísima efeméride que como tal viene cargada de citas. El próximo veintidós de marzo la Sociedad Filarmónica de Málaga conmemora sus primeros ciento cincuenta años de presencia continuada en nuestra ciudad. Y para festejarlo ultiman una publicación coordinada por la profesora María Ruiz Hilillo, así como la actualización de su web que ya es visible. Pablo Lamothe -actual presidente de la Sociedad- junto a su junta directiva proponen para los socios y todos aquellos aficionados que quieran acercarse a su sede en la Sala María Cristina casi una veintena de conciertos por los que desfilarán grandes solistas del panorama nacional e internacional sin perder la vista a los intérpretes locales como la Capilla del Maestro Iribarren que dirige Antonio del Pino. La Málaga Brass Band, la danza de Massimiliano Sandford, El piano de Boris Berman, Judith Jáuregui y Paula Coronas prologan el concierto de clausura con el recital de Joaquín Achúcarro. Noviembre reserva el escenario de la María Cristina para revivir el concierto que un siglo atrás protagonizara Maurice Ravel y no será el único puesto que el veintiuno de febrero Ángel Sanzo y Trino Zurita recrearán el concierto que en 1906 interpretara Pau Casals. Concerto Málaga, la OFM, la guitarra de Rafael Aguirre y otras muchas citas celebran por todo lo alto esta nueva temporada de la Sociedad Filarmónica.