Bastien Und Bastienne

W.A. Mozart

Solistas: .Sonia García, Diego Morales, José A. Ariza, Toñi López

Dirección de escena: Nacho Fortes

Dirección musical: Santiago Otero

Teatro Cánovas

Con el apoyo de la Fundación Musical de Málaga y la Asociación de Amigos de la Ópera, el Teatro Cánovas ha presentado la puesta en escena de 'Bastien und Bastienne', pequeña ópera cómica -o singspiel- escrita por un jovencísimo Amadeus Mozart en 1768, cuando apenas tenía doce años. Opéra pensada para el disfrute de amantes de la lírica pero también en familia si se considera la vocación ingenua y divulgativa entre los más pequeños de la casa. No es de extrañar así que el auditorio estuviera repleto de oyentes muy exigentes a los que hay que convencer tanto en el plano canoro como en el actoral.

La producción musical y escénica corrió a cargo de la compañía Teatro del Arte y la Orquesta Málaga Camerata. Escasez de medios compensada por el contínuo movimiento de los actores incluyendo el propio patio de butacas y reforzado lumínicamente en determinados pasajes, como la escena del conjuro del Mago Colás.

Nacho Fortes, responsable de la adaptación y la dirección de escena, mantiene el espacio atemporal y pastoril que rodea la historia pero la acerca al público gracias a los numerosos guiños al momento actual conectando con el público más joven. Prueba de ello eran las caras de sorpresa, la atención prestada durante todo el desarrollo de la historia y como público entendido el reconocimiento al término de la representación.

El elenco solista estuvo encabezado por la soprano Sonia García y el tenor Diego Morales, ambos inclinarían el plano vocal hacia lo actoral a pesar del apoyo musical brindado por del maestro Otero desde el foso. Más resuelta fue la participación de José A. Ariza, convincente en lo actoral consigue dar cuerpo al mago farsante llenándolo de momentos cómicos. En lo canoro se descubre fortaleza técnica de la que cabe destacar el aria del sortilegio. Cerraba el capítulo protagonista la actriz y bailarina Toñi López consciente del papel aglutinador con el trío solista.

Para Málaga Camerata esta producción sirvió de prólogo a la temporada que comienzan contando en el foso con la dirección del malagueño Santiago Otero. Málaga Camerata brilló con sencillez y pulcritud ofreciendo sonido claro, de matices tintineantes y dando frescura a la versión defendida por la batuta. El Mozart de Otero destaca por ser sólido en cuanto idea y cristal como construcción y para tallarlo no duda en destacar la propia ingenuidad de la partitura, sus frases llenas de melodías o la dinámica sostenida que eleva el tono y el resultado final de esta pequeña ópera mozartiana.