¿Podríamos definir La disputa

Sí, se puede ver así. Son dos grandísimos escritores y filósofos, conocidos y reconocidos. Al mismo tiempo son dos grandes enciclopedistas cuyas ideologías y creencias bifurcan. Rousseau es uno de los que abandona el grupo de los enciclopedistas y Voltaire se lo reprocha. No es en ningún momento una obra sobre filosofía. Es sobre el enfrentamiento de ambos sobre el concepto distinto de sociedad que tienen el uno y el otro. Los dos defienden con igual honradez y honestidad sus distintas maneras de concebir la sociedad.

¿Reivindica esta obra la capacidad de disentir con el otro sin llegar a la grosería o la descalificación?

Claro. Nos demuestran que el debate es posible y sobre todo la actualidad permanente de todo su pensamiento. Hay que pensar que Voltaire y Rousseau expresan sus ideas unos treinta años antes de la Revolución Francesa, con Luis XV como monarca absolutista y con el absolutismo religioso de la Inquisición que torturaba y quemaba a la gente. Y ellos exigían, sobre todo Voltaire, la separación de poderes. Nada más actual que hoy en día. Pero en aquella época, solamente por decir separación de poderes, ya te quemaban. El valor de estos hombres y cómo presentan y defienden sus ideas te dejan con la boca abierta. Todo lo que ellos ponen encima de la mesa y discuten es candente. Y en ese sentido nos interpelan contínuamente.

¿Cree que el teatro debe servir para remover la conciencia de los espectadores?

Para mí, el buen teatro es el que te distrae enseñándote cosas que a lo mejor ignoras o que te provocan reflexión y debate. Creo que en ese sentido es enriquecedor. Te modifica o te civiliza, como lo puede hacer también cualquier novela de calidad que puedes leer en casa.

Lo que parece evidente es que nuestros políticos han leído poco a estos dos filósofos...

Así lo creo. Nos hacen falta unos cuantos Voltaire...

Voltaire además era un gran defensor de la cultura.

Sí. Para Rousseau, la cultura era lo que se enseña. Y sostenía que todo lo que se enseña era malo porque el ciudadano nace inocente y es la sociedad la que lo pervierte. Él quería acabar con la educación, que la consideraba mala. Y Voltaire le reprocha que lo que quiere es que el hombre vuelva a caminar a cuatro patas y volver a las cavernas. Voltaire cree que si bien es cierto que en la sociedad no todo está bien, sí que hay cosas buenas. Y se posiciona en contra de destruirlo todo para empezar de cero. Son esos dos mundos los que se oponen. Además, en ese momento Rousseau está encerrado en una especie de ensoñaciones y quiere destruir la sociedad para reconstruirla. Y este es un debate que toca muchos temas de los que se habla en la actualidad.

Una actualidad muy marcada por los constantes cambios políticos y la aparición de partidos como Vox. ¿Qué opinión tiene al respecto?

Apelaré a Voltaire. Hablamos de educación, pero sobre todo de civilización. Hay que intentar mejorar el mundo civilizándolo. Algo que parece difícil. Porque parecía que estaba olvidado todo lo que ocurrió con la Segunda Guerra Mundial, pero ahora vuelve a renacer. Y resulta increíble que hayamos dado todos esos pasos hacia atrás. Qué hemos hecho para llegar a esto. O qué no se ha hecho para que esto vuelva a saltar a la escena.

¿Y no será, simplemente, que no hemos cambiado tanto como creíamos?

¡Pero durante unos años creímos que se había conseguido cambiar algo! Muchos creímos que algo sí que habíamos cambiado. Y no solamente en Andalucía y España: también está pasando en Europa y en Estados Unidos. ¿Qué está sucediendo? ¿Qué se ha hecho mal? ¿Por qué se llega a esta situación? Yo sigo pensando que es una cuestión de educación, de cultura y de civilización. Parece que los ciudadanos están cada vez menos civilizados.

Y cada vez somos más individualistas.

Sí, estamos en la sociedad del yo, yo, y yo. La sociedad, tal y cómo está organizada o por cómo estamos obligados a vivir por la clase de trabajo que hay, parece que los abuelos tienen que vivir automáticamente abandonados por la familia. En unas clínicas en las que nadie los visita porque son viejos.

¿Cree que estamos deshumanizados?

Creo que hay una parte de eso. Y sobre ello podríamos decir que la economía de mercado ha ganado al ser humano.