Apoyar al sector librero. Impulsar la lectura. Desvelar el maravilloso mundo que contienen las páginas de esos objetos que descansan en las estanterías. Facilitar las ganas de escribir. Mostrar los caminos para ser mejores lectores y escritores. Regar con poesía los días de primavera. Recordar a los grandes literatos de antaño. Celebrar a los nuevos... La cuadragésimo novena edición de la Feria del Libro de Málaga arrancó este viernes con los mismo objetivos con los que nació y con el reto, cada día más complejo, de concitar un firme apoyo por parte de todas las instituciones.

La inauguración de ayer coincidió con la última jornada de la campaña electoral, por lo que los mensajes -palabras al fin y al cabo- por parte de los políticos fueron en este sentido más que optimistas. «Desde la Junta creemos que hay que dar un impulso potente al mundo de las letras andaluzas. Esa va a ser una de nuestras prioridades en el ámbito cultural», señaló la delegada territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico, Carmen Casero, que acudió a la apertura de la feria acompañada del alcalde malagueño, Francisco de la Torre, y del rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez. Antes de recorrer la treintena de casetas que estarán instaladas en la plaza de la Merced hasta el próximo 5 de mayo, Casero explicó que estas ayudas se plasmarán «en una nueva línea de subvenciones para el sector de la edición y las librerías, que debe de corregir una situación de abandono del anterior gobierno».

Aunque fueron las palabras del novelista y poeta Vicente Luis Mora, encargado de pronunciar el pregón inaugural, las que mejor sirvieron para ilustrar el espíritu de esta celebración del libro y la lectura. Otro de los protagonistas de esta primera jornada fue el malagueño Javier Castillo, que acudió a firmar ejemplares de su nueva novela, Todo lo que sucedió con Miranda Huff, lo que provocó una destacada cola de público.

Esta Feria del Libro, organizada por los gremios editores y libreros de la provincia malacitana, también centrará su mirada en el recientemente fallecido poeta Manuel Alcántara. Sus versos ilustrarán la primera publicación de Imprenta Sur tras su reapertura, que tendrá lugar tras casi cuatro años de trabajos de restauración y adecuación. El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, anunció ayer que Imprenta Sur -que ha dado los mejores escritos de la Generación del 27- volverá a ponerse en funcionamiento.

Por su parte, la Universidad de Málaga, que participa un año más en la Feria del Libro es la responsable del encuentro anual de las letras en Málaga. La muestra cuenta con la participación del Vicerrectorado de Investigación, a través del Servicio de Publicaciones y Divulgación Científica y la marca UMA Editorial, la ETS de Arquitectura, encargada del diseño y ejecución de la carpa central de actividades y una generosa representación de la comunidad universitaria implicada en diversas actividades para la promoción del libro y la cultura. La caseta de UMA Editorial expone una selección de más de un centenar de libros de su fondo editorial, que cuenta con cerca de 1.000 títulos, con especial relevancia de obras sobre Málaga y su provincia, manuales académicos y estudios de género. Además ha programado citas de presentaciones, centradas en las últimas novedades publicadas.

Entre los actos destacables del primer sábado se encuentran un taller de escritura japonesa, las firmas de Eva Collado y Laura Chica, dos referentes dentro de las redes sociales, estarán presentes con acto y firma; las presentaciones de los nuevos libros de Fran Perea, Carlos Sisi, Edurne Portela y Mohamed El Morabet. En la programación de firmas diarias los asistentes tendrán la oportunidad de conocer a José Pablo García y su cómic Soldados de Salamina y a los poetas Ben Clark y Jorge Villalobos.