El uso cultural del Convento de la Trinidad vuelva a estar en una situación de indefinición que no lo asocia a ningún proyecto concreto. Tanto la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, como el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, dejaron ver en una comparecencia celebrada en La Aduana que el Centro Nacional sobre Diseño y Arquitectura propuesto por Fernando Francés no les convence en una ubicación como la que ofrece el Bien de Interés Cultural.

A este respecto, Patricia del Pozo reiteró que en La Trinidad se hará «lo que quieran los malagueños» y condicionó su futuro a una reunión con De la Torre: «Tengo que sentarme con el señor alcalde, el anterior proyecto que había planteado contaba con el apoyo de ciertos colectivos en la sociedad malagueña, pero no contaba lo suficiente con el criterio del Ayuntamiento y también es cierto que el señor Francés, como secretario general del área, propuso la posibilidad de ese centro de Diseño». «Yo estoy abierta a todas las posibilidades, estaba esperando que se conformara la corporación para hablar con el alcalde de todos los temas sobre la ciudad y en ese intervalo vino el señor Francés de visita a Málaga y propuso el centro de Diseño», aclaró.

Así, insistió en que su uso será el que «en la sociedad malagueña se prefiera; si se quiere seguir adelante con ese centro de diseño, preparamos la licitación en los próximos días para el proyecto y lo sacamos, pero yo tengo que sentarme con las instituciones, Diputación y Ayuntamiento, para ver las distintas sensibilidades». «No quiero hacer nada en ninguna provincia sin los respaldos de estas corporaciones y no me cierro a nada; si se quiere el centro de diseño lo trabajamos y si hay alguna otra opción mayoritaria -centro cultural, expositivo o multidisciplinar, lo que sea- nos ponemos con ello», agregó la consejera «convencida de que en cualquier decisión que se tome sobre el Convento de la Trinidad, la opinión del alcalde vendrá más que contrastada con los colectivos sociales».

En este punto, De la Torre recordó que «hace muchos años planteamos un proyecto museístico de ambición al hilo de los proyectos de Bellas Artes y Arqueología, y mi opinión personal es que La Aduana se dedicara a Bellas Artes, y hubiéramos tenido un museo aún más potente, y Arqueología se hubiera llevado allí, al Convento de la Trinidad». «Surgió el problema del Bellas Artes cuando el Picasso se instala ahí y hubo que buscar un espacio; pero podía haber sido una oportunidad haberlo hecho de esa manera, no se aceptó nuestro ofrecimiento entonces, entre los años 2006 y 2008, para rehabilitar a nuestra costa La Trinidad para haber hecho posible ese desembarco simultáneo de dos grandes museos», señaló De la Torre. A su juicio, «hoy, ese espacio está vacío pese a que ha tenido tantos destinos cambiantes, recordemos el Parque de los Cuentos, y lo último que ha surgido es el Museo del Diseño, que podría ser pero lo veo en un edificio de hoy, donde haya juego entre el continente y el contenido, no en un uno con cinco siglos de historia».

Según De la Torre, el uso «habrá que consensuarlo con la consejería, el ministerio, la academia de Bellas Artes y el barrio». «Seguro que buscaremos algo potente, puede ser en la línea que he recordado con cierta sensación de oportunidad perdida y puede haber otras opciones», expresó para reiterar que «aquella idea me encantaba, me parecía magnífico tener aquí en La Aduana un museo que conectara con el Prado y otro allí que conectara con el Arqueológico nacional o museos europeos como la British». «Málaga es una provincia de gran raíz arqueológica y la tradición de Bellas Artes es importante pero la posibilidad de que el Prado nos apoyara para utilizar La Aduana también era buena, contamos ahora con una consejería abierta al diálogo que no va a tomar las decisiones de espaldas», dijo llegando a remitirse a su idea de la subsede del Prado.