Más allá de la crítica que pueda hacerse al producto televisivo, al guión, a los diálogos de los protagonistas, a la ambientación o al ritmo de la trama, la serie Malaka que TVE estrenó en la noche de este pasado lunes en su prime time, con sus dos primeros episodios, ha causado furor en las redes sociales, hasta convertirse en trending topic nacional. Los mensajes publicados por los parroquianos de la red social del pajarito, muchos de ellos malagueños, destacaban lugares reconocibles de la ciudad, bromeaban con los giros lingüisticos y expresiones coloquiales y celebraban la irrupción de un pitufo en el desayuno de uno de los personajes, de un gazpachuelo en el almuerzo de otro o de una tortilla liá, en la cena.

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O que Adrián marcara un gol en el futbolín de la cafetería de Fernan, a pase de Mula, una situación que difícilmente podrá darse esta temporada en el Málaga CF. Al menos, hasta diciembre...

Pero como suele ser ya habitual entre el público foréneo, la serie no escapó de la crítica por el acento utilizado por los actores. Es razonable que los diálogos de en una serie rodada en Málaga, ambientada en Málaga y protagonizada por artistas malagueños se utilice el acento malagueño. Como ya ocurriera en otras producciones, como por ejemplo, en La Peste (ambientada en la Sevilla del Siglo de Oro), algunos tuiteros pedían subtítulos porque decían que les costaba entender lo que Salva Reina, Maggie Civantos y compañía decían. Provocando un aluvión de críticas. Sobre todo de los de aquí.

Muchos comparaban Malaka con Narcos y cómo en el caso de la serie de Netflix, pese a su marcado acento colombiano, pocos o ninguno se quejaban. Algo parecido ocurrió también con Fariña y el gallego, perfectamente inteligible, sin embargo.

"Muerde qué rollo", "mu perita", "merdellón", "bajar a Málaga", son algunas de las expresiones utilizadas en los primeros dos capítiulos de Malaka y que fueron rápidamente reconocidas por los tuiteros malagueños. También muchas de las localizaciones de La Palmilla, El Candado o los Baños del Carmen. Y el río Guadalmedina. Y por supuesto, también el Cautivo.

En líneas generales, Malaka gozó de un amplio respaldo tuitero y de gran aceptación popular. Habrá que estar pendientes (contraprogramación mediante) al próximo lunes para poder ver la siguiente entrega. De momento, la audiencia, además de Twitter, ha hablado: más de 1,8 millones de espectadores (13%) siguieron anoche el estreno.