Poco o nada queda ya para lanzar su nuevo trabajo que recoge éxitos como Un poquito y Esa mujer, que ha publicado en los últimos meses. ¿Qué nos queda por escuchar aún?

Van a seguir escuchando canciones, ya estoy preparando la siguiente. Es como a modo de capítulos de un libro como están saliendo. Pero en poco tiempo la gente se va a encontrar con el disco. Es como si fuera una temporada de una serie y la gente se va a ir dando cuenta de por qué cada canción y cada título. Estoy muy contento con la respuesta que han tenido los dos temas que han salido por ahora. En Un poquito tuve la suerte de colaborar con Carlos Vives, la experiencia fue buenísima. Además, está entre las canciones más escuchadas en las plataformas musicales y Esa mujer también ha funcionado muy bien. Ahora hay más exigencia y muchas ganas.

Su último trabajo se publicó en 2015, hace ya cuatro años. ¿Le daba miedo la vuelta después de tanto silencio?

La verdad es que no me lo he planteado. Uno siente esos nervios y la ilusión que genera lanzar música nueva para los seguidores, pero nada de miedo.

¿A qué ha dedicado su vida en este tiempo?

No he estado apartado de mi faceta profesional. Mis giras son muy largas, duran bastante tiempo. Además lo he compaginado con proyectos actorales como Casi Leyendas, con Santiago Segura, Reloca ¡y me encanta!, una película argentina. Y también he estado preparado el nuevo disco. Así que, en realidad, no he parado mucho en este tiempo.

Han pasado 25 años desde que se diera a conocer y ha vendido más de 20 millones de álbumes. ¿Qué siente cuando escucha esta cifra?

Uno se siente todavía en el camino de ida, trabajando con mucha ilusión. Cuando miro hacia atrás y veo todo lo vivido me sorprende mucho el pasado. Tengo muchas expectativas en esta nueva etapa y con el nuevo proyecto que tan buena acogida está teniendo.

Hablar de Diego Torres es hablar de Color Esperanza, ese gran himno que sigue muy presenten en la sociedad actual. ¿sigue manteniendo esa filosofía?

La filosofía es siempre la misma en la vida, por muchos años que pasen. Hay que aprender a vivir y saber que somos capaces de hacer lo que nos proponemos.

¿Hay esperanza para la sociedad con el panorama actual que se está viviendo?

La esperanza y la fe siempre vienen y van a lo largo de nuestra vida. No podemos vivir sin la esperanza de tratar de estar lo mejor posible con todos los que nos rodean y de ser felices con nosotros mismos.

Además de cantante también es actor, como ha comentado anteriormente. ¿Dónde se siente más cómodo: en un escenario o delante de una cámara poniéndose en la piel de otra persona?

Yo empecé siendo cantante y actor la mismo tiempo, así que me encantan ambas. Ahora acabo de rodar dos películas y también estuve actuando en telenovelas.

También tiene una faceta solidaria. Ha colaborado durante años con Unicef y la ONU en campañas contra la violencia de género. ¿Qué le ha aportado a nivel personal?

Yo creo en la posibilidad de ayudar y poner tu granito de arena, aprovechando tu posición en causas que son importantes y para ayudar a las personas que realmente lo necesitan.

¿Cómo definiría las nuevas tendencias musicales actuales? Como la gente dice, la música de ahora nada tiene que ver con la de antes.

La música es solo música. Yo no sé si hay música de ahora o de antes; sólo sé que hay muchos estilos diferentes y cada uno podemos elegir lo que queremos escuchar. La música es muy importante en nuestra vida y siempre ha ido variando.

El próximo 12 de noviembre actúa en el Teatro Cervantes, ¿cómo se siente cuando visita España?.

La verdad que me siento muy bien cuando estoy allí. Málaga además es una bella ciudad y tengo muchas ganas de ir, de rodearme de ese ambiente que la caracteriza, de visitar el teatro...

A nivel musical y actoral ha triunfado, es evidente. ¿Le queda algún sueño por cumplir?

Tengo algunos aún por cumplir, pero si los digo no se cumplen, así que prefiero callarlos y esperar...

¿Qué queda de ese Diego Torres que empezó en el mundo de la música?

El pelo largo es lo único que conservo después de tantos años. También la misma ilusión y ganas en los proyectos en los que trabajo, eso nunca me ha faltado. Mi vida es muy distinta ahora, pero estoy muy feliz a nivel personal y profesional.