La mayoría de niños y niñas sueñan con ser futbolistas, astronautas o triunfar en Hollywood, aunque para Claudia Pedrajas, malagueña de 15 años, convertirse en arpista profesional fue su sueño desde los 7 años.

Ahora, 8 años más tarde, Claudia ha colaborado con varias de las orquestas más prestigiosas de España, ha ganado el concurso Arpa Plus 2016, celebrado en Murcia, certamen internacional que cada año reúne a estudiantes de arpa de España y Portugal. Además, fue seleccionada para el certamen de Intercentros Melómano 2018, una iniciativa de la Fundación Orfeo creada en 2002 que escoge a 3.300 participantes procedentes del 80% de los conservatorios y centros autorizados de música españoles.

Claudia nos cuenta su ya extensa trayectoria como arpista a su temprana edad, sus perspectivas de futuro, sus comienzos y lo complicado que es compaginar sus estudios con las clases de arpa en el Conservatorio Profesional de Música Manuel Carra, donde actualmente está en el cuarto curso y donde solo le quedan dos.

Todo comenzó con 7 años, cuando la profesora de música de su hermana le animó a que se apuntara. «Elegí el arpa porque lo vi en La Sirenita y me gustaban mucho las hadas y las sirenas», asegura cuando se le pregunta por su fascinación por uno de los instrumentos más singulares y complicados de tocar (el arpa es un instrumento polifónico, es decir, que emite diferentes sonidos de forma simultánea).

Pero el arpa no es el único instrumento que ha tocado, ya que, según comenta, hace un año probó con el fagot y también posee un piano en su casa, que le ayuda para la asignatura de piano complementario que tiene. Ella lo tiene clarísimo: «La música no es fácil ni tampoco un hobby. No lo hago por diversión o placer sino que para mí es mi trabajo». Actualmente está cursando el tercer curso en el Conservatorio Manuel Carra, que tiene un total de seis, y en tres años irá al Conservatorio Superior de Música de El Ejido.

Gracias a su talento, Claudia está colaborando con diversas orquestas, como la Academia Orquestal de Málaga y la Joven Orquesta del Sur de España (JOSE) en Granada. A la primera orquesta a la que acudió fue la Joven Orquesta Provincial de Málaga (JOPMA) con 13 años. La primera vez que tocó en la Joven Orquesta del Sur de España fue en diciembre de 2018. «No tuve nervios ya que tocar me relaja», asegura Claudia, quien «se atreve con todo, no le tiene miedo a nada», declara orgulloso su padre.

Claudia ha participado en numerosos certámenes, de los cuales ha ganado el concurso Arpa Plus 2016 celebrado en Murcia. También participó en las ediciones de 2014, a la primera a la que acudió y a la de Zaragoza en 2017, en la que quedó en segunda posición. «El año pasado decidí no acudir y este año tampoco porque me coincide con el viaje de fin de curso», manifiesta la joven arpista, con una mezcla de alegría por finalizar Secundaria con sus compañeros y amigos en un viaje que le hace mucha ilusión y un poco de melancolía por no poder participar en la nueva edición de Arpa Plus.

Carrera musical y buenas notas

Claudia es el ejemplo de que se pueden compaginar los estudios obligatorios, los complementarios como en este caso la música, y tener una vida social como la de cualquier adolescente de su edad. Actualmente está en 4º de la ESO en el IES Puerto de la Torre y, según afirma, tiene «una media de notable-sobresaliente».

Cuando finalice Secundaria, realizará un bachiller musical en el IES Sierra Bermeja, en el que tendrá 3 horas diarias de instituto, en las cuales cursará las asignaturas básicas y clásicas (lengua, historia, matemáticas e idiomas) y 3 horas de Conservatorio.

Y, sí, tiene tiempo libre, en el que le gusta «leer, ver series, animes y salir con los amigos». «La clave está en organizarse bien y soy muy responsable». Claudia no solo tiene unas aptitudes prodigiosas sino también una actitud y madurez impropias de su edad, que, combinado todo, le ayudará a conseguir lo que ella se proponga. El futuro es suyo.