Preguntar al anfitrión de una fiesta por lo que ha costado tal o cual detalle de la cita es, sin duda, una descortesía; lo verdaderamente importante es agradecer la invitación, disfrutar del encuentro, alabar lo alabable y soterrar lo mejorable. Pero cuando uno es arte y parte de la organización del guateque, las preguntas no están de más, ni mucho menos. A 15 días de la celebración de la gala de los Premios Goya en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena, la confidencialidad es máxima: los licitadores de los servicios a concurso para la realización de la ceremonia sólo pueden consultar de manera presencial las imágenes digitales que recrean específicamente el proyecto de la transformación del Carpena. Sin embargo, algunos detalles han salido a la luz; son pequeños pero reveladores de las dimensiones de la cita festiva con el cine español.

Como no podría ser de otra manera, la propuesta gastronómica para la «cena tipo cóctel» tras la entrega de los galardones estará vinculada a la cocina malagueña y basada en la utilización de productos con el distintivo Sabor a Málaga, el sello creado por la Diputación para proteger, difundir e impulsar la gastronomía y hostelería de la provincia. Será un menú formado por un mínimo de 15 pases en el que el ingrediente principal o alguno de los empleados deberá poseer el referido distintivo; la cena se estructurará con elaboraciones frías asociadas a snacks, quesos, embutidos y productos curados, semifríos y calientes, además de postres (por supuesto con alternativas vegetarianas y para comensales alérgicos e intolerantes).

Tipos de vinos

Todo está pensado hasta el más mínimo detalle: por ejemplo, la empresa adjudicataria del catering de la ceremonia ha tenido que incluir en la memoria técnica de su proyecto un mínimo de 4 tipos de vinos, de los cuales el 75% o más son de denominación de origen Málaga y Sierras de Málaga con el sello Sabor a Málaga.

La cena se servirá entre las 1.30 y las 3.30 de la madrugada; después, turno de la barra libre, en barra y bandeja, entre las 3.30 y las 5.30. Se especifica que son «horas aproximadas», lo que viene a significar que más de uno y de dos van a poder contemplar el precioso amanecer malagueño desde el Palacio de los Deportes. Algunas raves han cerrado antes.

¿Y el personal que servirá todo esto? Se especifica que se requerirá un camarero por cada doce invitados. Teniendo en cuenta que se prevé la asistencia de 3.000 personas, hacemos las cuentas y nos salen 250 camareros. ¿A cuánto sale la cena tipo cóctel y la posterior barra libre? La factura será de 122.727,27 euros.

Pero no se vayan todavía, que hay más cifras impresionantes, porque esto del glamour y alrededores tiene chicha: ¿saben cuánto vale instalar, montar, mantener y desmontar la moqueta para la ceremonia de los Goya? Hablamos de, atención, más de 6.000 metros de ese material rojo con el que muchos identifican los estrenos y premios de cine. Pues la cosa sale por 49.900 euros. Pero valdrán la pena para que todos, no sólo la gente del cine español, nos sintamos un poco estrellas: la gran explanada del Palacio de los Deportes José María Martín Carpena contará con una gran alfombra roja para que el público también pueda ser partícipe de esta cita. Al fin y al cabo, todos los malagueños somos los anfitriones.

Como explicó estos días la concejala de Cultura, Noelia Losada, el retorno de la inversión total de Málaga por los Goya «está más que justificado»: en Sevilla, donde se celebró la noche del cine patrio el año pasado, se generaron cinco millones de euros, además de unas imponentes cifras en hoteles y restaurantes; sin olvidarnos de los intangibles de lo que supone un acontecimiento en términos de imagen para una ciudad. Que los Goya vengan a la capital de la Costa del Sol supondrá una inversión de 2,4 millones de euros, que sufragará el Ayuntamiento con el apoyo (a 500.000 euros por cabeza) de la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial de Málaga y Unicaja.