Después de una década dedicada al mundo de la música, no es hasta el pasado año cuando decide sacar su primer disco en español. ¿Por qué no antes?

Vas experimentando, evolucionando y te vas dejando llevar. Según va surgiendo la inspiración vas haciendo y, justo en este último año, que he estado viviendo en Granada, me he rodeado de artistas que hacen música en español. Me inspiraban a mí también a hacer música en castellano. Además, yo ya tenía curiosidad por probar a mantener el sonido que yo tenía pero en español.

¿Ha sido más complicado el proceso de elaboración de este disco que de los tres anteriores?

Ha sido más complicado por ser algo nuevo para mí. El inglés es más moldeable, suave y melódico a la hora de usarlo en las canciones. Y el español, por ser algo nuevo, se me hizo más complicado. Pero a la vez ha sido muy inspirador, me he sentido de una forma muy diferente a como me venía sintiendo con el inglés. En español se me han abierto puertas nuevas que no conocía de la inspiración, el arte y todo eso es muy bonito.

¿Cómo se podría definir, entonces, este nuevo trabajo?

Es súper complicado definirlo. Tengo la sensación de que cuando defino un disco con un estilo musical lo limito. Para hablar hace falta ponerle etiquetas a las cosas, sino se queda todo muy efímero, pero me cuesta un montón. Yo sé todo lo que hay ahí dentro y este disco es mucho más libre que otros, en el sentido de estructuras, de haber creado las canciones... Pero no sabría en qué estilo meterlo. Dejo que lo hagan los demás.

Es un disco muy autobiográfico que, a la vez, gira mucho alrededor de lo astral. ¿Cómo vive esa relación con el universo?

Llevo muchos años leyendo sobre astronomía y siempre me ha llamado mucho la atención, me ha parecido algo muy bonito y me ha inspirado mucho. Siempre tenía la sensación de que los discos tenían poco de aquello en lo que realmente estaba interesada. Conforme lo iba escribiendo me hacía mucha ilusión el poder tener una relación tan directa con este mundo. Una relación de amor o algo terrenal siempre la puedes llevar a algo más espacial y extraterrestre.

¿Podríamos afirmar que este es el disco con el que más identificada se siente?

Aunque suena a tópico, sí. En este disco he metido yo más mano en la producción, hice la preproducción en casa... Ha pasado por algunos arreglos pero respetando las demos que yo hice en casa sola, en el ordenador. Lo siento mucho más mío y me siento más identificada con esta forma de hacer canciones que otras veces.

Desde sus inicios ha afirmado librar una lucha interna contra su timidez. ¿Ha cambiado algo en estos cuatro años?

Sigo luchando. Cuando estoy hablando con una persona no tengo problema, en el momento en el que me pongo encima del escenario me cuesta muchísimo. Creo que ya forma parte de mí y la gente va conociéndome, por lo que no se lo toma como algo malo o negativo. Quizás si canto o escribo es porque me cuesta mucho expresarlo de otra manera. Me gustaría dar otra respuesta pero sigo igual de tímida que al principio. Lo gestiono un poco mejor, queriéndome un poco más... Mientras esté disfrutando de la música y haciendo disfrutar, eso es lo bonito.

¿Qué se siente al formar parte de un ciclo de conciertos como el ciclo Única?

Me siento muy bien por varias razones. Es un ciclo de mujeres, que hoy en día es necesario. Tengo muchas ganas de que estos ciclos de mujeres se conviertan en ciclos normales, que no haya nada que reivindicar porque eso significará que todo el esfuerzo que hemos hecho para visibilizar a la mujer han servido para algo. De momento es muy necesario y es genial que esté ocurriendo, además es mi tierra y me hace mucha ilusión que cuenten conmigo.

En este sentido, ¿cómo ve y siente la situación actual de la mujer en el panorama musical?

Hace unos años recuerdo ir a salas de conciertos y no tener ninguna credibilidad, decirle al técnico de sonido que había un problema y tener que hablar con algún músico mío para que se lo dijese y creyese la situación. Hoy en día se lo piensan dos veces. No sé si realmente lo sienten pero le dan una vuelta y eso es lo importante. Creo que la cosa está yendo mejor pero aún queda mucho camino por recorrer, sobre todo en la educación. La música es un reflejo de la sociedad y si la sociedad no está educada en la igualdad, la música y la cultura se ven salpicadas también. Hay que atajar el problema de raíz.

Universo por estrenar es un disco muy eléctrico, ¿cómo cree que va a sonar en un formato tan íntimo y acústico como el de Universo por estrenarÚnica

Las canciones se van a quedar muy desnudas, se van a escuchar detalles de voces que cuando estás con banda no se aprecian tanto. Hay algunas canciones, también, que vamos a tocar de otra manera y de pronto parecerá que tienen otro significado. Y eso es muy bonito, el ampliar el significado de las canciones. Espero que lo disfruten un montón y lo pasemos muy bien todos con este formato.

Mirando al futuro, si hay ya pensado un próximo disco, ¿con qué idioma sorprenderá?

Vamos a estar durante todo 2020 girando con este disco pero, a la vez, voy a estar escribiendo. Cuando acabo un disco siempre estoy maquinando el siguiente. Creo que va a ir en castellano y si mezclo el ingles sería una sorpresa también para mí. Me da la sensación de que me queda muchísimo terreno por explorar en el lenguaje español, sé que quedan cosas que necesito experimentar.