Ya tenemos a la primera víctima del panorama de festivales veranieogs en Málaga: finalmente no nacerá, al menos este año, Brisa Festival, el certamen impulsado por la Diputación provincial de Málaga y que durante el 19 y 20 de junio debía reunir en el dique de levante del Puerto de Málaga a bandas como Crystal Fighters, Carolina Durante, Coque Malla, Danza Invisible, León Benavente, Sidonie, Niños Mutantes, Soleá Morente y Zahara. La organización de la cita anunció su cancelación por la emergencia sanitaria y la devolución inmediata de las entradas adquiridas.

"Como sabéis, el Gobierno ha puesto en marcha un proceso de desescalada del confinamiento, con fechas variables, pero con plazos mínimos. Por desgracia, en el mejor de los casos, para las fechas previstas estaríamos todavía inmersos en este proceso y no está permitida la realización de un festival como Brisa", además de que sería una temeridad por la emergencia sanitaria en la que nos encontramos. Es por esto por lo que, sintiéndolo muchísimo, nos vemos obligados a cancelar esta primera edición del festival", señalan los responsables de Brisa.

Y es que si hay una actividad cultural dificultada por la nueva normalidad es la de los festivales de música: ya saben, multitudes de personas, muy juntas, compartiendo, casi piel con piel, la experiencia de un concierto. Ante la desescalada anunciada por el Gobierno, el resto de grandes festivales de la provincia (Weekend Beach de Torre del Mar, Marenostrum Castle Park de Fuengirola, Starlite de Marbella y Ojeando de Ojén, entre muchos otros) mantienen por ahora sus fechas a la espera de que el Gobierno concrete medidas para ellos, aunque los expertos prevén una más que probable cancelación de estos eventos. Nadie cancela, porque quien cancela, paga. Y dicen los promotores que no pueden cancelar nada unilateralmente hasta que no tengan una orden que nos lo indique por motivos de fuerza mayor, como pasa en otros países.

Así que la mayoría de festivales de verano se mantienen en el calendario a la espera de próximos anuncios. En Alemania ya han decretado que no habrá festivales hasta el 31 de agosto, pero una orden similar no se ha producido en España por lo que el sector sigue trabajando en pos de sus citas, aunque reconoce que lo suyo sería trasladar los festivales al año que viene, que las entradas sirvan y que el reembolso no estrangule a la organización.

La organización del festival de Torre del Mar sí ha querido dirigirse a sus seguidores con un comunicado en el que aseguran que "todo parece indicar que se tendrá que aplazar la edición" al 2021. "Aún no puede tomar la decisión definitiva de posponer" la cita, matizan sus responsables. "En cualquier caso, llevamos mucho tiempo trabajando en todas las opciones posibles, incluyendo al aplazamiento del festival. Si eso ocurriera, queremos que no os preocupéis por las entradas. Los abonos serán válidos automáticamente para el festival en 2021, cuando celebremos la edición por todo lo alto con el mismo cartel ya anunciado y con nuevas confirmaciones que seguro os encantarán", finalizan.