El 'Nautilus', el lujoso submarino diseñado por el capitán Nemo, contaba en su interior con una nutrida biblioteca. Guillermo Busutil, el periodista, escritor y columnista de La Opinión, decidió el pasado 18 de marzo, al poco de decretarse la cuarentena por el coronavirus, embarcarse en una simpar aventura: abrir la particular escotilla de su 'Nautilus', una habitación cargada de libros en su casa de Málaga, y compartir por las redes sociales, con otros robinsones de la lectura y de la música, fragmentos de novelas, cuentos, poemas y ensayos, así como canciones para levantar el ánimo entre los confinados.

Entre estos últimos, cuenta el escritor, una pareja que cada día baila con la canción que él escoge, antes de ponerse a desayunar.

A muchos internautas de España pero también de Francia o Estados Unidos están llegando estas recetas de cultura que ha llamado 'La Ventana del Nautilus'.

En el caso de los textos, siempre breves, explica que «son elegidos en función de que transmitiesen belleza, una filosofía de la supervivencia, y que significasen el valor del instante de un abrazo, un soplo de aire, la esperanza de volver a vivir a mar abierto, en ese tiempo en el que hemos sido erizos entre las rocas».

Cada día, un texto escogido, ya sea de Muñoz Molina, Aurora Luque, Emilio Lledó, Isak Dinesen, Luis Alberto de Cuenca, Alfredo Taján, Joan Margarit...

Como explica, tiene buena memoria lectora y eso le permite buscar la reflexión, en prosa o en verso, que mejor puede acompañar el día, aunque en ocasiones tiene que navegar por muchos libros hasta dar con lo que quiere.

Y siempre, tras la lectura, una reflexión final relacionada con lo leído y «enfocada la esperanza, a descubrirnos mejores, a gozar lo que antes obviábamos», recalca.

En estos casi 60 días asomado a la ventana del Nautilus, pues los domingos no hay lecturas, ha tenido en cuenta a los colectivos que han luchado durante la pandemia, desde los sanitarios a los kiosqueros, las pequeñas tiendas, los supermercados, las madres que han mantenido los afectos o a los docentes «que han tutelado el conocimiento».

Y detrás del periodista, asomado entre los libros en cada una de estas cerca de 60 lecturas, una postal de Lorenzo Saval con un capitán en la proa de un barco que navega sobre el mundo, guiño de amistad al simbólico nombramiento de 'capitán de barco' que hace unos años le regaló a Guillermo Busutil.

Con lo que no hay tregua en 'La Ventana del Nautilus' es con la selección musical, que es diaria; una fonoteca de los años 70 y 80 que lo misma anima a estar «Staying alive» con los Bee Gees que a saltar con Tequila; canciones de Led Zeppelin, Rick Ashley o los malagueños Javier Ojeda y Dry Martina para comenzar el día.

Y en el muro de su facebook, palabras de agradecimiento por esta navegación a través de tantas islas invitadas: «Tu ventana está siendo muy ancha durante estos días tan estrechos», dice uno de los internautas.

En algún momento, el 'Nautilus' dejará la bahía de Málaga. Habrá dejado una estela de buenos momentos gracias a la cultura, la que nos mantiene a flote.