Para un dibujante de cómics trabajar en Marvel es jugar la final de la Champions League todos los días. El Olimpo de los superhéroes, con permiso y respeto para DC, por supuesto, es el gran sello editorial del arte de las viñetas y los bocadillos, en constante evolución a partir de su lema, el icónico excelsior del fundador, Stan Lee: «¡Hacia arriba y hacia adelante por la gloria mayor». Eso pasa, claro, por renovar su plantilla de hacedores de sueños, de dibujantes y guionistas. La firma acaba de agrupar a sus ocho artistas más prometedores y los ha denominado Stormbreakers con el objetivo de destacar sus contribuciones y ofrecerles encargos cada vez más ambiciosos. Entre ellos está la malagueña Carmen Carnero, que lleva ya años dibujando para Marvel y da así otro decidido paso adelante.

Carnero y sus compañeros (hay tres españoles más, todo un espaldarazo para el talento comiquero nacional: Natacha Bustos, Juann Cabal e Iban Coallo) han sido elegidos personalmente por el editor en jefe de Marvel, C. B. Cebulski, y el director creativo Joe Quesada. «Estos ocho artistas han demostrado su incomparable talento y pasión por la narración y, al igual que Beta Ray Bill [el primer ser fuera del mundo nórdico del Universo Marvel digno de empuñar el martillo Mjolnir de Thor], son verdaderamente dignos de asumir el papel de uno de los Stormbreakers de Marvel, la próxima generación de artistas de élite. Estamos ansiosos por mostrarles todo lo que sigue. Y a todos nuestros Stormbreakers: ¡tomen su martillo!», aseguran ambos en el comunicado.

Stormbreakers es la evolución de Young Guns, un programa que a lo largo de los últimos 15 años ha puesto en la pole a 36 artistas del sello (Steve McNiven, Jim Cheung, Sara Pichelli y Ryan Stegman, entre otros), ofreciéndoles las mejores series y encargos para demostrar todo su potencial.

Carmen Carnero lleva tiempo en lo más alto, aunque, en su caso, parece que no hay límites en su ascenso. «No solo es una artista fantástica, sino también una colaboradora increíblemente generosa. Tiene un ojo maravilloso para la narración y el diseño que me impresiona siempre. Y lo único que sobrepasa su pasión es su compromiso de hacer el mejor trabajo que pueda», asegura Kelly Thompson, la guionista de Capitana Marvel cuando se le pregunta por la malagueña.

Su inclusión en los Stormbreakers demuestra que Marvel, tras confiarle la reinvención de la superheroína por excelencia y de Miles Morales, el Spider-Man de nueva generación del sello, tiene en Carmen una de sus grandes bazas. Es un nuevo galón para un portfolio de impresión, engordado poco a poco, con esfuerzo, tesón y algún ingrediente más, tal y como confesó hace un par de años en una entrevista en Comicparatodos: «Yo creo que todo ha sido pura casualidad, de estar en el momento justo y en el sitio adecuado. Creo que ha sido así. Yo tan pancha, porque la verdad es que trabajar con esos personajes es un lujo».

Una masterclass del gran Joe Kubert en Granada (se formó en la Facultad de Bellas Artes de esa ciudad) fue una pequeña gran epifanía para Carmen Carnero: entonces, esta admiradora de grandes como Alex Ross y Bernie Wrightson decidió que sería dibujante de cómics. Comenzó en la sombra, siendo entintadora de otros dibujantes pero pronto su nombre propio fue sonando y pocos años después, ya ha trabajado con bastantes de sus ídolos. Ahora ya es una stormbreakers y tiene su martillo.