Vuelve la poesía en primerísima persona del singular, vuelve Irreconciliables, un festival de lírica que sigue apostando, en su novena edición, por «formatos novedosos, originales y atractivos, pensados para fomentar la lectura y el conocimiento de las letras españolas», driblando los peligros de estos tiempos de la Covid-19. A partir del 15 de octubre, versos para todos, especialmente para todos aquellos que entienden la expresión creativa como algo necesariamente rompedor y anticonvencional.

«Un año más nos reinventamos buscando estrategias para ir más allá de la rigidez del formato canónico de lecturas al uso para brindarle al público experiencias poéticas no convencionales, a través de medios y lenguaje distintos, capaces de dialogar con la poesía tradicional, entre ellos, la música, la performance, las tecnologías, el teatro o el spoken word», asegura el poeta y editor Ángelo Néstore y la artista Violeta Niebla, coordinadores de la cita. Y pone como ejemplo la fiesta a modo de freak show con tarot poético, lectura de mano y de astros poéticos con la que se inaugurará el ciclo.

Espacios abiertos

Las intervenciones seguirán desarrollándose en lugares alternativos para así crear experiencias «únicas y envolventes» y, claro, adaptadas a los protocolos higiénico-sanitarios de la nueva normalidad; así, por ejemplo, esta temporada la mayoría de actos se desarrollarán en espacios abiertos, como los jardines del Contenedor Cultural de la Universidad de Málaga, los jardines de La Térmica, el Centre Pompidou Málaga, el auditorio del Museo Ruso, la sala principal del Centro Cultural MVA y el ya clásico paseo en barco con poesía.

Juan Gallego Benot y Rosa Berbel, Pablo Gisbert, Lara Moreno, María Luisa Tomás y Miguel Zurita, Paloma Chen e Isabel Pérez Montalbán, Manuel Mata y Pompa e Boato, Beatriz Ros, Alessandra García y Alejandro Robles son, entre otros, los protagonistas de la agenda ideada por Néstore y sus colaboradores. Muy atractiva es la lectura dramatizada La memoria me está dando una tarde imposible, inspirada en la figura de Rafael Pérez Estrada partiendo del libro El levitador y su vértigo (1999). Pero habrá mucho, y muy variado y pertinente en la agenda del ciclo (el programa completo puede consultarse en la web www.irreconciliables.com).

«El festival reúne y concilia a autoras y autores consolidados o prometedores con el afán de constatar que todas las voces poéticas activas enriquecen la paleta de colores lírica sin que la exclusión o el sectarismo contaminen las diferentes escenas poéticas. Irreconciliables quiere dejar patente la eficacia del enriquecimiento mutuo, fuera de camarillas, agrupaciones subjetivas, amiguismos y otras miserias que contaminan este tipo de foros, confundiendo al lector y devaluando la esencia de la expresión poética», aseguran los organizadores de Irreconciliables. Así que ya saben, amantes de la poesía del hoy mismo, háganle un hueco en su agenda a estos jóvenes palabristas.