Recién llegados de presentar su LP debut en Madrid, dos tercios del grupo malagueño La Trinidad charlan con este periódico sobre Los edificios que se derrumban. Su primer disco sorprende con ritmos más melódicos, en el que se dan cabida desde baladas románticas hasta hits en clave de punk. Todo ello bajo su propio sello, manteniendo viva su esencia. Charlamos con Sixto y Carlos, dos vértices del triángulo (el otro es Jorge).

¿Cómo está siendo lanzar un disco en plena pandemia?Sixto

: Está siendo raro. Pero nos sentimos muy afortunados porque no todo el mundo puede permitirse en estas circunstancias sacar un disco.

Carlos: El disco estaba listo desde principios de febrero y pospusimos la publicación, nos quemaba ya en las manos. Al final terminamos enseñándoselo a nuestros amigos.

Sixto: Es lo que a nosotros nos mola: si el disco no les gusta a nuestros amigos chungo tema, ya puede ser un disco de oro que si no les mola a mis colegas... Teníamos un poco ahí el miedo de cómo iba a funcionar, no ha sido un lanzamiento normal pero está teniendo buena acogida.

¿Han notado esa falta de apoyo institucional que se viene denunciando desde el mundo de la cultura?Carlos

: Ojalá hubiéramos notado la falta de apoyo porque significaría que antes lo teníamos. No ha habido conciertos en 2020 ni al aire libre. Que vivimos en Málaga, joder, la ciudad del sol. Que se hagan conciertos en la calle no me parece nada descabellado. Aquí es que no se deja hacer cosas, es lamentable.

Sixto: La última licencia de una sala de conciertos que se repartió en Málaga fue en 1997. No puedes ni montar un concierto acústico en un bar, eso es lo que llevamos viendo aquí desde hace años. Luego Málaga es la ciudad de la cultura.. Mentira, aquí la gente no puede vivir de la cultura.

¿Cómo afrontan estas limitaciones a la hora de presentar su disco? Porque intuyo que el streaming

: Lo último que estamos buscando es dar un concierto con la peña dándose de hostias en el público, eso sería el sueño húmedo. Con dar un concierto con la peña sentadita nos daríamos con un canto en los dientes. Hicimos un streaming y no vamos a hacer más. Yo es que no soporto el formato acústico, menos para un grupo como La Trinidad.

Carlos: Si ya dar un concierto con gente sentada y con mascarillas es raro, darlo delante de una cámara es todavía más marciano.

En este disco encontramos sonidos más melódicos y pausados, ¿alguna influencia que motive esos giros?Carlos

: En este disco es la primera vez que volcamos la influencia directa de The Smiths, por ejemplo, con las guitarras de Johnny Marr. De grupos españoles siempre referenciamos a Ilegales, sobre todo; también a Nacha Pop en su primera época... Vamos mezclando influencias pasadas con algunas más modernas, como algún guiño a Carolina Durante porque es imposible escapar de su influencia.

Sixto: Hay muchos grupos modernos que nos molan pero La Trinidad, a la hora de referenciar, poco o nada tiene que ver con la actualidad. Creo que hemos tenido la pericia de saber traer el disco al presente. A pesar de tener referencias clásicas, saber renovarlas y hacer que el disco suene a un disco de 2020 y no a uno de los 70.

Además, van a la yugular con el mensaje que quieren transmitir, frente a lo básico y lo vacío de las letras de hoy en día.Sixto

: Sí. El otro día Carlotta Cosials, de Hinds, nos dijo: «Joder, por fin gente que ha dejado de escribir la misma canción. Habéis ampliado el campo semántico y eso se agradece».

Carlos: Claro, ya no es tanto lo que cuentas sino cómo lo cuentas. Tratamos de no hacerlo todo tan referencial.

Sixto: Tejemos aristas a cosas que ocurren en nuestra ciudad, en el día a día, a veces de forma más poética y otras completamente crudas. Hablamos de situaciones cotidianas pero con dos dedos de frente, que el mundo es suficientemente complejo y duro como para no hacer referencia a estas situaciones. Y que la música es arte, no es solo para ponértela de fondo -que también la hay- pero nosotros no hacemos ese tipo de música.

Al título, Los edificios que se derrumban

Sixto: Sí, justo eso. El disco está muy inspirado en mi experiencia personal viviendo en Praga durante mi Erasmus. Allí viví de cerca la arquitectura brutalista, que estaba concebida como vivienda social para que absolutamente nadie se quedara en la calle. En el barrio donde viví pude observar cómo todo eso estaba en ruinas, de que ese concepto tan solido de una arquitectura para el pueblo se ha derruido, y con ello se ha denostado su ideología.

El guiño ya absoluto es Málaga. El día menos pensado Paco de la Torre echa abajo La Alcazaba. Es una constante que me parece muy triste y más para un grupo como nosotros, que lleva por nombre un barrio de su ciudad y somos localistas, en el mejor de los sentidos. Es una pena ver cómo se destruye nuestro patrimonio y a favor de qué se está destruyendo.

Con la metáfora de los edificios que se derrumban me remito a lo más solido, cuando muchas veces crees que algo se derrumba pero no ha hecho falta el empuje de nada, se ha derrumbado por sí solo. Como fue, en mi caso, la pérdida de una amiga que falleció. Gran parte está dedicado a ella en ese sentido.

El disco contiene temas muy dispares con los que puede identificarse cualquiera: el amor con "Sensación extraña"; la crisis generacional con "España invertebrada" o la situación nacional con "La clase media"... ¿Es ésta una de las claves de su éxito?Sixto

: Nos gusta concebirlo así. Para este disco llegamos al estudio con una propuesta muy amplia de influencias. Tiene canciones que como subtema puede tener uno pero luego, a través de los versos, te lleva a otros lugares y es lo que hace que el disco sea más rico.

Carlos: Sí, en el grupo se juega mucho con lo explícito y al mismo tiempo con lo implícito. Por eso hay mucha gente que nos cuenta una cosa u otra de las letras y eso es lo bonito, encuentran un doble sentido que es el que ellos quieren que exista. Resignifican la obra y es lo que tú dices, yo creo que es parte de lo que le gusta a la gente

"Ruinas" es una forma perfecta de captar la atención. El hecho de que dure tan poco te incita a seguir escuchando el disco.Sixto

: Sí, lo has definido genial, está concebida como una intro corta.

Carlos: De hecho solemos tocarla la primera en los conciertos.

Sixto: Es un tema que no es una gran canción pero que en ese punto del disco, que es el inicio, funciona a la perfección. Desde el primer momento pensamos que esa iba a ser la intro del disco y de los conciertos. Es una forma de resumir pero al mismo tiempo no resume del todo el disco.

"Te espero en el Moldava" es un temazo también.Sixto

: Sí, estuvo a punto de ser el último single de hecho, antes que La clase media, pero cambiamos de opinión por hacer el tercer adelanto un poco más loco. Igual nos equivocamos y hubiese sido un pedazo de hit, de hecho es la que está funcionando mejor después de los singles. Es verdad que es una canción más oscura, es la que menos gracia me hace tocar en directo porque es la más explícita con el tema de mi amiga, pero al final está ahí, tienes que afrontarla.

Carlos: Sobre esa canción me llama la atención que es de las que más se ha reinterpretado. Muchas veces nos han hablado de ella como una canción de amor.

Sixto: Era un poco la intención, que pareciese una canción de ruptura, le tuve que dar una vuelta para que no sonara tan explícita.

Pregunta tópica: Si tuvieran que quedarse solo con una canción del disco, ¿cuál sería?

Carlos: Pues no es tan tópica porque no sabría decirte. Yo creo que me quedo con "Todos los rumores eran ciertos" pero es que depende de la semana...

Sixto: Tenemos como un top tres interno de canciones que no son los singles. Está ahí el debate entre "Todos los rumores eran ciertos" y "La clase media", son las dos canciones que más nos molan, que más nos gusta tocar.

Sin llegar a ser parecidas, ¿son quizás las que más se asemejan a trabajos anteriores?

Sixto: Sí, quizás por actitud, porque sean más rudas, más a la yugular.

Carlos: También por la producción, son sonidos más distorsionados y agresivos.

Sixto: Claro. El disco, en general, es bastante limpio. Las guitarras son muy limpias entonces sí, puede que sean las que más suenen a lo anterior. Pero al mismo tiempo, "La clase media" es la más diferente que hemos hecho hasta la fecha, con ese spoken word. Puede ser la que más entronque pero al mismo tiempo es la más distinta de absolutamente todo lo que hemos hecho antes.

Han estado en el Puerto de Santa María grabando en el estudio de Paco Loco y, además, el disco ha sido producido y mezclado por John Agnello, ¿qué tal la experiencia?

Carlos: El estudio de Paco es, si no el mejor, uno de los mejores que hay en España, más para grabar guitarras. Y en concreto Paco sí es el mejor de España. La experiencia fue una locura, en el mejor de los sentidos. Es un tío muy trabajador, una máquina de ideas que siempre te sale por la tangente. Es muy currante y creativo, nos tenía 12 o 14 horas al día grabando sin parar.

Sixto: Yo me siento mucho más estrella del rock en un momento así que estando de gira. Estás todo el día haciendo música; te levantas pensando en la música; comes pensando en las canciones... El momento de la creación lo disfruto muchísimo. Congeniamos con Paco Loco y eso fue la hostia.

Para la mezcla queríamos un productor extranjero, Paco le habló del proyecto y le moló.Vino desde Estados Unidos, estuvo cinco días currando y mezcló el disco, que suena a las mil maravillas. Tuve la suerte de estar esos cinco días con él y lo admiro una barbaridad, ha grabado muchos de mis discos favoritos. Es encantador, te escucha como si fuese tu colega... Es un lujazo y ojalá tengamos la oportunidad de volver a trabajar con él.

Este año no se ha portado nada mal con La Trinidad, ¿qué planes tienen para 2021?Carlos

: Que nos dejen tocar, con mascarillas y distancia de seguridad. No hacer un pepino de gira pero poder hacer algo.

Sixto: El sello está encima de nosotros para grabar un EP. Dependemos mucho de cómo funcione el mundo pero como Sixto, y no como miembro de La Trinidad, me gustaría meterme de lleno a trabajar en un segundo disco porque sí me da más miedo.