v. a. g. málaga

El cajón es un instrumento musical de origen peruano que apenas era conocido más allá del ámbito de la música folclórica, hasta que el percusionista brasileño Rubem Dantas, integrante del sexteteo de Paco de Lucía, lo introdujo en el ámbito del nuevo flamenco. Para el conocimiento y la difusión de esta gran herramienta del compás se creó el festival Cajonea, que año tras año lleva el ritmo a Torrox. En esta ocasión, el coronavirus ha obligado a que los organizadores reformulen su agenda, llevando toda la programación al espacio online, a lo largo y ancho de un mes: «Hemos optado por crear un Cajonea desde la distancia y para la distancia, y para ello vamos a difundir el compás a través de internet, para de esa forma llegar aún más lejos», aseguran.

La cita comenzará el 16 de noviembre, el Día Internacional del Flamenco, con un homenaje a Paco de Lucía a través de una performance dirigida por el artista y gestor cultural Pepe Zapata, la Planta y tacón (lo que según palabras del maestro De Lucía, es lo que vio en el cajón cuando lo escuchó por primera vez), que contará con la bailaora La Moneta y acompañada por el grupo Raíces.

A partir de ahí, durante cada jueves y viernes hasta el final del Festival, se brindarán conferencias y clases magistrales (la australiana Nasrine Rahmani, el brasileño João Paulo, el cubano residente en Rusia Yoel González y Pancho Brañas, entre muchos otros, doctores del ritmo). Además el certamen se hermanará con su homólogo peruano, el Festival Internacional del Cajón y Percusión Rafael Santa Cruz, de Lima, una alianza que dará un singular fruto: una cajoneada virtual, dos ritmos y dos pueblos, separados por miles de kilómetros pero unidos por el latido del cajón.