Se supone que lo fantástico es amigo de la noche y la bruma pero el buen cine bizarro, singular y al margen de la tiranía de lo cotidiano funciona a la perfección a pleno sol. La prueba la ofreció ayer Fancine, que celebró la inauguración de su trigésimo edición en el Cine Albéniz a mediodía, obligado por las restricciones horarias impuestas por la Junta de Andalucía para luchar contra la Covid-19.

Alessandra García y Violeta Niebla, la pareja creativa al frente del colectivo Dos Bengalas, diseñó, una temporada más, una gala imaginativa, colorista y extravagante, que jugó con ironía y descacharre con los tiempos pandémicos que nos ha tocado vivir.

La proyección de la esperada Wendy, la reimaginación del universo de Peter Pan a cargo de Benh Zeitlin (el autor de la laureada Bestias del sur salvaje), culminó el que, seguramente, habrá sido el mediodía más raruno, simpático y loco de los últimos tiempos. Ahora, a disfrutar hasta el 19 de noviembre de un buen puñado de historias para no dormir (coronavirus aparte).