Es el concierto de los conciertos. El más visto, el más exclusivo, el más tradicional. Millones de personas comenzarán 2021 escuchando desde sus casas los valses del Concierto de Año Nuevo de Viena, también afectado por la pandemia: la Sala Dorada estará vacía y los aplausos saldrán de los altavoces.

Este abecedario repasa los aspectos más importante de un recital seguido en todo el mundo.

A de Aplausos: las restricciones contra la Covid-19 impiden que haya público en la sala donde se celebra el concierto, pero una aplicación permitirá a los filarmónicos recibir las ovaciones que envían los espectadores desde casa.

B de Ballet: la retransmisión televisiva del recital estará acompañada de representaciones de ballet grabadas previamente. En esta ocasión el Palacio Liechtenstein y la Looshaus en Viena son los escenarios elegidos, y la coreografía corre, por segundo año consecutivo, a cargo del español José Carlos Martínez.

C de Confinamiento: la celebración del evento coincidirá con el tercer confinamiento decretado por Austria para frenar la expansión de la covid, desde el 26 de diciembre hasta el 18 de enero.

D de Danubio Azul: la famosa composición de Johann Strauss hijo, el vals "En el bello Danubio azul" es un símbolo del Concierto de Año Nuevo. Se representa desde 1945 durante los bises, y su introducción se suele interrumpir con aplausos del público para que el director y la orquesta ofrezcan su felicitación por el nuevo año.

E de Esperanza: normalmente, el programa suele incorporar alguna referencia al año en el que se celebra. En esta ocasión no hay ningún "vals de la peste", pero La Filarmónica quiere enviar un mensaje "cargado de esperanza para el futuro".

F de Filarmónica: la Orquesta Filarmónica de Viena, fundada en 1842, es el conjunto que desde 1939 pone cada año música al primer día del año. Los intérpretes se escogen entre los integrantes de la orquesta de la Ópera Estatal de Viena, después de que hayan tocado en ella durante al menos tres años. Hasta el año 1997 no se permitía que hubiera mujeres filarmónicas.

G de Goldener Saal: la Sala Dorada (oficialmente la Gran Sala del Musikverein de Viena) es el lujoso escenario donde se celebra siempre el recital. El año pasado se cumplieron 150 años de su inauguración, cuando sonaron piezas inéditas tanto de Johann Strauss hijo como de Eduard Strauss.

H de Historia: hace más de 150 años que se dan conciertos para celebrar el año nuevo en la ciudad de Viena, pero no fue hasta 1939 que Clemens Krauss dirigió el que ahora conocemos como Concierto de Año Nuevo. El programa estuvo compuesto por música de Johann Strauss hijo, y por primera y única vez se interpretó el 31 de diciembre en lugar del 1 de enero.

I de Imágenes: además de los aplausos retransmitidos en directo por la emisora pública austríaca ORF, en esta edición los espectadores podrán enviar imágenes que se proyectarán durante la ovación digital.

J de Jardinería: los arreglos florales que decoran la Sala Dorada tardan cinco días en montarse y están al cargo de la empresa municipal de parques y jardines de Viena.

K de Krauss, Clemens: el primer director del Concierto de Año Nuevo desarrolló gran parte de su carrera en la Alemania nazi (de la que Austria era parte desde 1938). Tuvo amistad con altos cargos nazis, pero parece que también ayudó a las hermanas británicas Ida y Louise Cook a salvar a judíos que escapaban del antisemitismo nazi.

L de Lotería (de entradas): para el concierto que cada año se sortean las 1.300 localidades disponibles para la venta entre las decenas de miles de solicitudes que se reciben. Este año, su precio variaba entre 35 y 1.200 euros (o entre 42 y 1.460 dólares).

M de Muti: el italiano Riccardo Muti dirige este 1 de enero por sexta vez el concierto. Es el director vivo que más veces habrá llevado la batuta del evento. Su relación con la Filarmónica de Viena se remonta a 1971 y llevan ya unas 500 representaciones juntos.

N de Nazismo: la recaudación del primer Concierto de Año Nuevo oficial, el 31 de diciembre de 1939, se usó como donación para los esfuerzos de guerra de la Alemania nazi. Su director fue Clemens Krauss, un amigo íntimo de Joseph Goebbels, el temido ministro de propaganda nazi. La Filarmónica no asumió hasta 2013 sus vínculos con el nazismo y la purga de músicos judíos a partir de 1938. Cinco de esos músicos murieron en campos de concentración. Según ese estudio, en 1942, 60 de los 123 músicos de la orquesta eran militantes del partido nazi y solo cuatro de ellos fueron despedidos tras el fin del régimen.

Ñ de espaÑol: el español y España han tenido una presencia modesta pero importante en el concierto. El director argentino-israelí-español Daniel Barenboim lo dirigió en 2009 y 2014, y el venezolano Gustavo Dudamel en 2018. En años pasados se han interpretado piezas como el Vals Español, la Marcha Española o La danza gitana, inspiradas en temáticas españolas.

O de ORF: la televisión pública austríaca ORF retransmite el concierto en directo desde 1957, y este año llegará en directo a más de 90 países.

P de Pandemia: la situación sanitaria actual impide que el evento se desarrolle como otros años, y por primera vez no se permite público en el teatro. El dinero de las entradas ha tenido que ser devuelto a sus compradores.

Q de Quince: quince minutos después de las once (a las 11.15 hora local, 10.15 GMT) es cuando da comienzo siempre el concierto.

R de Radetzky: la Marcha de Radetzky, de Johann Strauss padre, es otra de las composiciones esenciales del acto. Aunque no forma parte del programa, se ha utilizado siempre para cerrar el concierto al ritmo de las palmas del público. Este año será la excepción debido a que no habrá público para ese acompañamiento.

S de Strauss: la familia Strauss es la protagonista indiscutible del Concierto de Año Nuevo. Sus composiciones son siempre las más interpretadas. Este año, de las 15 obras del programa, 10 pertenecen a compositores del linaje Strauss.

T de Tradición: los arreglos florales, las palmas en la Marcha Radetzky, la felicitación de año nuevo del director y la orquesta, El Danubio Azul... El Concierto de Año Nuevo está plagado de pequeñas tradiciones que se repiten cada enero.

U de Universal: se estima que la audiencia que cada año sigue el evento supera los 50 millones de personas. Se retransmite en toda Europa, Estados Unidos, China, Japón, Chile, Guatemala, Ecuador, Bolivia...

V de Vals: el vals, junto con la polca, la marcha, y la mazurca, es el género con mayor representación en los programas del evento. En esta edición se interpretarán seis, de compositores como Johann Strauss hijo, Carl Zeller, o Karl Komzác.

W de Wolfgang Amadeus Mozart: aunque el compositor es el astro indiscutible de la música austríaca, sus obras apenas se han interpretado en este concierto.

X de Xilófono: un instrumento que suena poco en el Concierto de Año Nuevo.

Y de Yermo: la Sala Dorada estará por primera vez vacía, una situación inédita a la que los intérpretes tendrán que enfrentarse con sus instrumentos. Lo más temido es el silencio y la falta de ambiente musical en la sala.

Z de Zubin: el director de orquesta indio Zubin Mehta, empatado con Muti en el número de Conciertos de Año Nuevo dirigidos, se convertirá el viernes en el segundo director vivo que más veces ha conducido el concierto.