Entrevista | Chica Sobresalto Cantante

"Quiero seguir sanando mis heridas a través de las canciones"

"Es increíble haber podido trabajar con personas a las que admiro desde hace años, la Maialen del pasado está flipando"

Chica Sobresalto.

Chica Sobresalto.

R.L.M.

Chica Sobresalto, álter ego y nombre artístico de Maialen Gurbindo, ha dado un puñetazo sobre la mesa de la escena musical nacional con su segundo disco, Sinapsis. La cantante, instrumentista y compositora navarra llegó a situarse en mayo en el número uno en ventas en España, tanto en la lista de álbumes como en la de vinilos. La joven artista, que concursó en la última edición de Operación Triunfo, está de gira por varias ciudades del país.

Su segundo disco está producido por Santos & Fluren (Love of Lesbian, Sidonie, Quique González...) y ha contado con colaboraciones como la de Zahara. Palabras mayores.

Es increíble haber podido trabajar con personas que admiro desde hace tantos años. La Maialen del pasado lo está flipando y aplaudiendo hasta con las orejas (risas). Me gusta mucho pensar en ella y en sus primeros conciertos.

¿Imaginaba esto?

Yo sabía que algo bonito iba a pasar con Chica Sobresalto, porque a diferencia de en Maialen, en ella sí confío. Pero la realidad a veces supera la ficción de mi imaginación. Todo esto es muy fuerte.

Al principio estaba usted sola con sus composiciones y sus instrumentos. ¿Cómo surge lo de tener una banda?

Fue en el momento en el que decidí grabar mi primer disco, Sobresalto. Todas nos conocíamos, ya habíamos tocado juntas y juntos. Cuando les enseñé las canciones, no tuve que hacer mucho por convencerlos. Se subieron al carro enseguida, jugando como siempre. Yo les prometí que no se arrepentirían y bueno, de momento y hasta que ellos quieran, vamos juntas hasta el infinito.

undefined

Cuando se presentó a Operación Triunfo su proyecto ya estaba en marcha. ¿Por qué decidió presentarse?

Teníamos las canciones, teníamos el disco casi grabado, pero no teníamos los medios. Miré a las canciones a la cara y les prometí que les daría una feliz y larga vida. Yo intentaba por todos los medios que el proyecto saliera adelante pero nadie me respondía los mails, nadie venía a los bolos... Me enfrentaba a esta paradoja a la que se enfrentan la mayoría de bandas. No te dejan tocar porque no te conoce nadie, y no te conoce nadie porque no te dejan tocar. Yo era seguidora del formato aunque no me veía dentro en ningún caso. Decidí que los prejuicios están para romperlos, los esquemas para enriquecerlos con nuevas ramas y los miedos para vencerlos. Me presenté sin ninguna expectativa, con el único fin de conseguir visibilidad para Sinapsis. Al final acabó siendo mucho más que eso, me lo pasé increíble por el simple hecho de no competir nunca.

¿Cómo valora su paso por OT?

Cuando empezó el programa yo estaba muy encerrada en mí, no es fácil estar ahí. Luego me nominaron y pensé: "A la mierda, si me voy, me voy fuerte". Total, que me quedé y casi llego a la final sin saber inglés, ni bailar, ni ser el prototipo de ‘ídola’ de nadie. Estoy muy agradecida al programa porque nos ha dado visibilidad, aunque sin todo el trabajo previo y posterior, sin esta cabezonería, sin esta forma de ponerlo todo sobre la mesa, tampoco estaríamos aquí, siendo número uno en ventas esta semana.

¿Qué quería contar en 'Sinapsis'?

'Sinapsis' es una forma de demostrarme que el hecho de que no seamos seres tan únicos, que haya un patrón pragmático dentro de nuestro cerebro, no hace que todos estos procesos sean menos especiales, incluso poéticos.

¿Hacia dónde quiere dirigir su música en un futuro?

Quiero seguir sanando mis heridas a través de las canciones y seguir jugando con mi mejor familia; crecer como persona y sentirme orgullosa de lo que hacemos. Quiero ser honesta ante todas las cosas y mejor artista para mis canciones.