Aurignac compone su «Música para Aeropuertos»

Cuando Brian Eno se quedó atrapado en el aeropuerto de Colonia a mediados de los 70 tuvo una idea: diseñar una música que se reprodujese de manera continua en una instalación de sonida para disipar la atmósfera tensa, de premura y de agobio que caracteriza a cualquier sala de espera de cualquier aeropuerto. Tituló el proyecto 'Music for airports' y es, desde entonces, uno de los álbumes de ambient más queridos y útiles (pruébenlo con auriculares: funciona) de la historia. La nueva aventura del inquieto Ernesto Aurignac es musical y tiene que ver con aviones pero su naturaleza es diferente: Aena ha elegido una pieza del saxofonista y compositor malagueño para ambientar musicalmente su vídeo de aniversario; un vídeo que se podrá ver y escuchar en bucle en todos los aeropuertos de nuestro país y en todos los canales y plataformas audiovisuales.

«Somos una gran orquesta, con una única partitura: conectar personas. Así que a quienes formamos parte de esta big band, felicidades», locuta la voz en off del vídeo institucional, sobre la música jazz, compuesta por Aurignac como encargo del Taller de Musics de Barcelona (la interpretación corre a cargo de la Young Effervescence Big Band del Taller de Músics). Aena ha elegido el sonido big band vibrante y repleto de chispa del autor malagueño para contagiar su ilusión por el aniversario a los viajeros.

Campo de acción

Ernesto Aurignac sigue diversificando su campo de acción. De un tiempo a esta parte, principalmente espoleado por el parón de la música en directo por la pandemia, se ha concentrado en el trabajo «en la sombra», como el propio músico malagueño lo denomina, escribiendo piezas de todo tipo y pelaje, perfilándose como compositor. Asegura que sólo este 2021 ha anotado 19 obras, incluyendo conciertos para solistas y orquesta, obras sinfónicas, obras de cámara como dúos, quintetos de metales, cuarteto de saxos y piano, pasodoble para banda de música, obra para coro y orquesta, marchas de procesión, obras para diversos ensambles, concierto para solistas y banda de música y temas para quinteto de jazz. Una de estas composiciones llegó a la final del Concurso Internacional de Composición de la Academia de Música Clásica de Viena. O sea, todo un espaldarazo desde el mundo académico para Aurignac, como su vuelo con Aena.