Exposición

Vilató: algo más que el sobrino del genio

Fue Javier Vilató el «hilo de Ariadna» con el que Pablo Picasso pudo mantener desde Francia el vínculo con España y con su familia. Ahora, regresa ahora a la Casa Natal del genio con una exposición de setenta obras - El hijo de Lola Ruiz Picasso «se crio mirando los cuadros de su tío» y ambos mantuvieron una relación muy intensa entre lo personal y lo artístico

Arancha Tejero

Javier Vilató se crio rodeado de los cuadros y cuadernos de dibujo de Picasso, que su abuela guardaba en un gran baúl en la casa familiar. La derrota republicana le llevó a un campo de concentración francés del que le rescataría su tío, que posteriormente sería el mismo que le introdujese en los círculos artísticos de París y quien le descubriese los secretos de la pintura.

Su hijo, y comisario de la muestra, Xavier Vilató, rememora la vida y obra de su padre en la inauguración de la exposición 'Vilató. 100 obras para un centenario'. Una exhibición que recoge la creación artística de Javier Vilató, sobrino de Picasso, que supo hacerse un hueco en el panorama internacional y crear su propio sello personal a pesar de su apellido. 

Esta nueva exposición temporal, formada por 70 piezas, 61 de ellas expuestas en el Museo Casa Natal de Picasso y las 9 restantes en el Centre Pompidou Málaga, se podrá visitar desde el 9 de noviembre hasta el 20 de marzo de 2022. 

El hijo del artista rememora la primera vez que visitó junto a su padre la Casa Natal donde hoy se exponen sus obras. Aseguró que se llevaron una gran sorpresa al descubrir el gran cultivo del mundo Picasso que se había forjado en la ciudad malagueña, que, por aquel entonces, era el único sitio que mantenía una llama muy viva del pintor. «Para mí siempre fue algo diferente a un museo, son recuerdos de una familia, el ambiente de mi bisabuelo, porque antes de casa natal era la casa de mi abuelito Pepe”», recuerda Xavier. 

“Hemos intentado hacer una exposición muy diferente a las que se han hecho hasta ahora”, declaró el comisario. Razón por la cual se han organizado, con la casa natal como epicentro, cinco muestras simultáneas, en el Centre Pompidou Málaga, Museo del Grabado Español Contemporáneo de Marbella, el Museu Picasso (Barcelona) y en la Sala de Exposiciones del Ayuntamiento de Almoradí (Alicante), para rendir homenaje al artista. “Javier ha construido una obra toda su vida y aquí se puede ver como nunca”, afirmó su hijo, quien espera que esta exposición  permita a los malagueños descubrir a un artista que “se sentía muy andaluz”. 

Las imágenes de la exposición temporal 'Vilató. 100 obras para un centenario' en la Casa Natal de Picasso

Una de las obras de la exposición temporal 'Vilató. 100 obras para un centenario' en la Casa Natal de Picasso. / La Opinión

Lenguaje propio

La exposición es todo un viaje por la vida de Vilató, en la que se puede apreciar los distintos estilos por los que pasó el artista a lo largo de su vida, desde el neoclasicismo hasta el cubismo. Su hijo afirma que fue a los 30 años cuando su padre comenzó a construir verdaderamente su propio lenguaje, el cual iba en gran consonancia con Miró, con quien entabló de hecho una gran amistad, hasta el punto de que el logo del artista fue diseñado por el pintor, como señala su hijo. 

Fue una beca del instituto francés lo que permitió el reencuentro entre tío y sobrino, comenzando verdaderamente ahí la relación entre ambos. A partir del intercambio con Pablo, Javier empezó a construir su propio lenguaje, que iría evolucionando y cambiando a lo largo de los años. Su hijo destacó que una de las principales aportaciones de su padre fue darles "curvas al cubismo" y alejarse de la pintura abstracta y la falta de sentimiento humano. Le gustaban las cosas sencillas y esenciales del ser humano, pues consideraba que la pintura no debía ser algo decorativo carente de sentimiento. No obstante, su hijo quiso remarcar cómo el apellido de Picasso le pesó durante toda la vida, y aunque no fue sencillo, su padre logró hacerse eco y encontrar su propia voz. 

Las imágenes de la exposición temporal 'Vilató. 100 obras para un centenario' en la Casa Natal de Picasso

Las imágenes de la exposición temporal 'Vilató. 100 obras para un centenario' en la Casa Natal de Picasso

Relación especial

Xavier asegura que la relación entre Javier Vilató y Picasso era muy intensa, pues, al fin y al cabo, su padre era el familiar más próximo que tenía Picasso y el único hilo que le mantenía atado a España y el resto de su familia. “El intercambio entre artistas era muy fuerte”, aseguró su hijo, y acabó convirtiéndose en un cóctel muy potente que culminó en la creación de un cuadro pintado a cuatro manos: Naturaleza Muerta (1946). Este hecho demuestra el estrecho e intenso lazo que les unía, pues son pocas las obras conjuntas que realizó el artista malagueño.

Raíces andaluzas

José María, director del Museo Casa Natal Picasso , quiso destacar la vena mediterránea que tenía Vilató, y como, a pesar de ser medio catalán y francés, "era en realidad un malagueño como su padre y su tío“. Las raíces andaluzas y conexión con esta tierra, se ven reflejadas también en sus obras, donde se puede apreciar alguna que otra guitarra española, pues, como asegura su hijo, “le encantaba el flamenco”. El director quiso remarcar también que, aunque fuese cierto que Javier era el sobrino de Picasso, está en la casa natal porque es un artista de primer nivel, con una sensibilidad y un lenguaje propio como corroboran esta exposición.

La exposición, que se lleva a cabo gracias a la colaboración de la Fundación “la Caixa”, ha sido presentada hoy en la sala de exposiciones temporales del Museo Casa Natal Picasso con la presencia del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, junto con la concejala de Cultura, Noelia Losada; Juan Ignacio Zafra, director territorial de Caixabank en Andalucía Oriental, y José María Luna, director del Museo Casa Natal Picasso.