Entrevista | Beatriz Hernández Directora del Skyline Benidorm Festival

"Skyline Benidorm es un lugar donde poder charlar de cine con los propios creadores cara a cara"

Hablamos con la directora del festival de cortometrajes más pujante del sector

Beatriz Hernández

Beatriz Hernández / La Opinión

Eduardo Parra

La salud del cortometraje español está mejor que nunca tras el Oscar a Alberto Mielgo por su obra 'El limpiaparabrisas'. Numerosas productoras a nivel mundial cada vez más se fijan en los creativos españoles que han decidido contar sus historias en un formato distinto y poco reconocido por nuestra industria. Para que gente como Alberto Mielgo pueda conseguir el sueño americano deben crearse espacios donde poder dar difusión a los trabajos realizados por los distintos creativos y es aquí donde los festivales o certámenes de cortometrajes se vuelven más necesarios que nunca.  Desde el 2 al 9 de abril se celebra el Skyline Benidorm Film Festival, la siguiente cita más importante en el panorama cinematográfico de nuestro país que empieza justo cuando acaba nuestro Festival de Málaga. En el mundo de los festivales de cortometrajes hay un nombre que de unos años hasta esta parte no para de resonar y ése es el de Beatriz Hernández. La directora de Skyline Benidorm Film Festival ha conseguido convertir una muestra provincial de cortometrajes en un evento significativo y con identidad propia dentro de nuestra industria en pocos años, algo que no está al alcance de todos. 

Viendo la evolución del Skyline Benidorm Film Festival tardamos poco en darnos cuenta de que no es un festival de cortometrajes al uso. 

Ése era el objetivo. Además de trabajar como productora soy amante del mundo del cortometraje. También he trabajado como distribuidora de cortos y eso me ha dado la oportunidad de viajar a muchos festivales de cine y ver como se trataba en España al mundo del cortometraje. En todo este bagaje ,exceptuando tres o cuatro festivales, encontré diferencias sustanciales en el trato que se le daba al cortometrajista. Sobre todo en aquellos festivales donde convivían ambos formatos, largo y corto, en estos el cortometraje estaba injustamente posicionado y devaluado. Los cortometrajistas estaban aparte, o le ponían en los peores hoteles o directamente no les invitaban. Al toparnos con esto me di cuenta de la injusticia que se estaba cometiendo con ellos porque ,a diferencia de lo que piensan o creen algunas personas del sector, fuera de España nuestros cortos están muy bien vistos, multipremiados y mejor valorados que incluso los largometrajes. 

Supongo que es un problema de incomprensión del formato. Olvidamos a veces que la propia naturaleza de la historia es la que impone su duración.

La calidad de una película no debe medirse por su duración. Un corto de veinte minutos ha triunfado y al pasarlo al formato largo no ha funcionado. Esa historia tenía un tiempo y no se puede alargar y si se hace quizá acabe convirtiéndose en un fracaso para la productora y la propia película. En nuestro país tenemos una idea preconcebida del cortometraje y su funcionalidad errónea como  hermano menor del largo o de posible ejercicio para impulsar el salto al largo y no es del todo cierto. Hay muchos directores que hacen cortos sin necesidad de hacer el largo y otros que compaginan ambos formatos.  

Y tras ver y sentir todo eso decidiste hacer algo al respecto como el Skyline Benidorm Film Festival.

En ese momento de mi vida en el que como distribuidora viajé por tantos festivales no pude evitar tomarme todo esto que estaba viendo de otra forma. Fue muy revelador. Si quería hacer un festival de cortometrajes en mi ciudad, una idea que se remontaba a cuando yo tenía unos quince años, quería que tuviera ciertas bases y sobre todo cuidar al cineasta y el amor al cortometraje. Desde la primera edición empezamos como una muestra de cortometrajes de un día y ya en esta edición instalamos un pago por proyección, algo que vi en otros festivales con renombre como el de Aguilar. El Aguilar Film Festival es uno de los mejores de este mundillo que tiene instaurado un pago por proyección al cortometraje y aparte cubren los gastos de todo el equipo de directores, productores y equipo para crear un debate sobre el estado del mundo del cortometraje. 

Tiene que ser abrumador sentir todo el apoyo que Benidorm está dando a este festival. 

Contamos con el apoyo del Ayuntamiento donde en el mismo celebramos la gala de clausura y entrega de premios. Proyectamos en el Auditorio Fundación Mediterráneo , la sala habitual del Skyline. Y de hecho tenemos más sedes como las salas de cine IMF, y también llevamos acabo actividades en la oficina de turismo de Benidorm donde concretamos uno de los eventos más importantes del festival como es el Shortpitch. Un concurso sobre proyectos de cortometrajes donde el ganador consigue un premio valorado en doce mil euros con el que podrá rodar su corto durante este año. Un premio patrocinado por empresas de la comunidad valenciana donde podrán gastarlo tanto en alquiler de equipos, asesoría legal, contratación de servicios, distribución, y una de las condiciones de ganar el premios es que tenga que rodar una parte del corto en Benidorm para además fomentar la industria dentro de la ciudad y que luego se pueda ver en festivales de todo el mundo como ha sucedido con los cortos ganadores. 

Y también dais un paso adelante con el concurso de guion de cortometrajes valorado en mil euros. 

Otra de nuestros aciertos, el concurso de guion de cortometrajes que lo llevamos celebrando cuatro años. Los guionistas nos mandan su guion y un jurado profesional se encarga de hacer una preselección de los últimos guiones finalistas. Y de estos el jurado dentro del festival decide el ganador que se lleva mil euros. Con todo esto lo que buscamos es  ayudar al guionista a llevar a cabo su cortometraje. Todo este tipo de premios lo que buscan es poner en muestra de valor nuestro amor por el mundo del cortometraje y fomentar una industria latente que no para de crecer. Ya no solo nos conformamos con la proyección de cortos, también tenemos el concurso de guion y el Shortpitch para las productoras. Los proyectos que llegan están muy evolucionados y con cierta parte de la financiación ya cubierta, todo eso suma. 

Todo esto ha ocurrido en muy poco tiempo, además no paráis de sumar nuevas secciones que aportan más calidad a la programación. 

Seguimos adelante. La novedad de este año ha sido la sección iberoamericana. Llevamos varios años recibiendo cortometrajes iberoamericanos y no podíamos quedarnos indiferentes. Nos pedían que proyectásemos sus cortos, eran trabajos de una calidad incuestionable y se acercaban al festival porque querían estar presentes en el. No teníamos secciones internacionales hasta el año pasado y este año por fin hemos inaugurado la sección iberoamericana. Estamos muy contentos con los cortometrajes recibidos. 

El compromiso con el cine por parte del Skyline queda retratado en muchos aspectos del certamen, entre ellos el homenaje al recientemente fallecido Roberto Pérez Toledo. 

Vinieron su hermana, amigos y colaboradores de sus trabajos tanto en largos como en cortos. Fue un acto muy emotivo. Proyectamos una selección de sus cortometrajes y mucho público que desconocía la faceta de este director en el mundo del cortometraje y se quedó sorprendido. Todos salieron encantados y preguntando donde podían ver más trabajos de Roberto Pérez. Nuestro objetivo era llevar la filmografía de Roberto al público y también acercar a todas las personas que vieron sus largos a esos trabajos primigenios que acabaron consolidándolo. 

¿Cómo es la relación con el público?

Cuando vas al cine termina la película y te vas a casa sin poder comentar aquello que has visto, o haces algún comentario con la gente con la que vas. Aquí no. Traer a profesionales del sector, poder ver sus trabajos y al acabar la proyección dialogar con ellos tranquilamente sobre lo visto es una experiencia única para el espectador. La creación de un lugar de diálogo donde poder charlar de cine con los propios creadores cara a cara es de las cosas más gratificantes para el público. 

¿Algún adelanto de próximas sorpresas? 

Terminamos este sábado día nueve, el día diez suelo descansar, pero el once empezamos a pensar en la nueva edición del año que viene. Es un año de trabajo. Ideas muchas pero los apoyos son los que limitan nuestros deseos para ampliar un proyecto de este tipo. Pero tenemos claro que las jornadas de industria funcionan y deberían ser más largas, incluir más actividades para un público más profesional e impulsar más el Shortpitch, algo que nos está dando muchas alegrías. 

¿Y supongo que también deseáis entrar en la lista de festivales calificadores para los Goya?

Sí, presentamos el Skyline Benidorm Film Festival en la Academia de Cine este año por primera vez. Vino mucho público, tanto prensa como seleccionados, gente que conocía el festival y gente que no nos conocía aún. Fue muy emocionante. La idea es alcanzar a corto medio plazo el calificado para los premios Goya.

Suscríbete para seguir leyendo