Concierto

Dua Lipa desata la fiebre disco en el Palau Sant Jordi

La estrella británica ofreció un espectáculo sensual y hedonista, luciéndose como diva pop, a cuenta de su celebrado segundo álbum, ‘Future nostalgia’

Concierto de Dua Lipa en el Palau Sant Jordi de Barcelona.

Concierto de Dua Lipa en el Palau Sant Jordi de Barcelona. / Quique García

Jordi Bianciotto

Eficaz mecanismo, el de Dua Lipa, para disipar durante hora y media los vestigios de niebla pandémica y las tribulaciones mundanas de cada día: esbeltos hitos danzantes, espectáculo, hedonismo, un poco de humor y algo de feliz disparate en un ‘show’ que vino a abrir la descollante temporada de conciertos a golpe de disco-pop de altos vuelos. Con guiños a los 80, para solaz de ‘boomers’, y alto rendimiento ‘tiktoker’, juntando públicos en su debut en Barcelona, este miércoles en el Palau Sant Jordi (entradas largamente agotadas), concierto al que seguirá otro el día 9, ese en el marco del Primavera Sound.

La base la puso ‘Future nostalgia’, su segundo álbum, desde el primer tema, ‘Physical’, cuyo vídeo, recordó, grabó en Barcelona (en un pabellón de la Fira). Ecos de Olivia Newton-John a juego ‘retro’ con las rotulaciones a lo ‘Miami vice’ para anunciar a la tropa de diez bailarines. Dua Lipa apuntó maneras como diva, y su corpulenta voz de mezzo-soprano imprimió un sello propio a ese repertorio elegante y ‘sexy’. Temas que podrían causar envidia a Kylie Minogue o a Sophie Ellis-Bextor, y que defendió con suma sensualidad (aunque sutil en comparación con los perreos latinos).

Andares felinos

Dominó la escena dando juego a los suyos, que bien podían transitar en patines o esbozar coreografías con paraguas. Rotación de vestuarios con ajustados monos de Balenciaga y andares felinos en ese aviso a navegantes llamado ‘New rules’, en el que nos vino a decir que aquí manda ella. Mucho disco-funk para llevarse a la boca con deleite, aunque en su día, en ese resultón ‘Break my heart’, se le fuera la mano y fusilara un ‘riff’ de INXS.

Se agradeció su sentido del humor, con ese ataque de la langosta, literal, al que hizo frente en ‘We’re good’, acompañada de imágenes de pavorosas criaturas de cine ‘pulp’. La sensualidad sin mayores coartadas envolvió ‘Good in bed’, ‘One kiss’ desvió el foco al cuadrilátero alternativo, donde ella (casi) se confundió con los bailarines, y ‘Cold heart’ incluyó el dueto virtual con Elton John. De ahí al ascenso a las cumbres del Sant Jordi en ‘Levitating’.

El propósito de esta londinense de padres albano-kosovares es, ha dicho, producir canciones atemporales, propósito peliagudo en el ramo del ‘hit’ para la pista de baile. Pero Dua Lipa cuenta ya, al menos, con un número para los anales del disco-pop, ‘Don’t start now’, canción sobre afrontar los cambios vitales, que coronó la noche con todos los méritos, transmitiéndonos el mensaje de mirar hacia adelante sin cargos de conciencia.