Música

El metal genuino de la Bay Area, en la Sala París 15

Testament y Exodus, acompañados por Heathen, resucitarán el thrash clásico en la sala malagueña

La actual formación de Testament (Gene Hoglan, a la derecha)

La actual formación de Testament (Gene Hoglan, a la derecha) / La Opinión

Víctor A. Gómez

Víctor A. Gómez

A principios de los ochenta, la Bay Area (California) fue uno de los escenarios que acogió el estallido y popularización de una versión más callejera del metal, donde los jeans sustituyeron al cuero y la agresividad a la épica más o menos tolkieniana. De allí son el grupo liderado por Chuck Billy y el prodigio de la guitarra Alex Skolnick (Testament) y el combo liderado por Gary Holt (donde militó Kirk Hammett antes de enrolarse en Metallica), ejércitos para el headbanging y el air guitar con las medallas propias de llevar más de 30 años de servicio. Presentarán sus credenciales, acompañados por los paisanos de culto Heathen, pasado mañana en la Sala París 15, un concierto postergado en varias ocasiones por la pandemia.

Los tres primeros discos de Testament son auténticos clásicos del género. En esta gira los recuperan, añadiendo a un repertorio que aún suena fresco y vital los quilates de la experiencia y la madurez. Hagan la prueba y redescubran temazos como 'The New Order' o 'First Strike is Deadly'. Se mantienen inalterables, cada vez más contundentes (la garganta de Billy es algo increíble), sin ganas de bajar el pistón. Hace unos meses les dejó Gene Hoglan, el mítico batería de Dark Angel y Death, pero no hay mal que por bien no venga: le ha sustituido otra leyenda del doble bombo, Dave Lombardo, las baquetas de Slayer.

Por su parte, Exodus siempre han demostrado ser una banda más irregular, menos relevante (tienen un genuino tótem en su discografía, 'Bonded by blood', de 1985), pero su tenacidad y su desprecio por las corrientes que vienen y van les hace un refugio para los metaleros de ideas fijas. Como en el caso de Testament, sus últimos álbumes, especialmente 'Persona Non Grata', les muestra en sus aristas más potentes y oscuras, siempre con el magisterio de Gary Holt a las seis cuerdas.

También de la Bay Area llegan otros invitados de la velada: Heathen. Los más doctos del lugar se acordarán todavía de su lejano debut, 'Breaking the Silence', de 1987, publicado en el entonces sacrosanto sello Roadrunner. Se distinguieron por su variedad de influencias (de Megadeath a la New Wave Of British Heavy Metal) y, especialmente, por la calidad técnica de sus instrumentistas, aunque siempre les faltó algo de personalidad y punch para militar en las primeras líneas de batalla. Sus más recientes álbumes, que modernizan un tanto su sonido, mantienen errores y desaciertos pero son más que disfrutables para los más nostálgicos de un sonido, de un lugar y una época que ya no volverá. 

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