Toros

El clasicismo de Fuentes Bocanegra triunfa en el Certamen de Escuelas

El cordobés, alumno del centro de Jaén, gana la final y se hace con un hueco en los carteles de la próxima Feria Taurina - Ernesto Lorenzo, sobre todo, y Alberto Donaire fueron apeados de la gloria por la espada

Fuentes Bocanegra, ayer en la final del Certamen de Escuelas Taurinas.

Fuentes Bocanegra, ayer en la final del Certamen de Escuelas Taurinas. / Gregorio Marrero

Daniel Herrera

La Feria Taurina de Málaga 2023 ya tiene un primer nombre en los carteles. El reservado al ganador del XV Certamen Internacional de Escuelas Taurinas de La Malagueta. Expectación máxima en los tendidos, en una cita que se ha convertido en fundamental para la promoción de la Fiesta en nuestra ciudad.

Hora y media antes del comienzo del espectáculo, largas colas de espectadores se agolpaban en las puertas del coso para acceder a una barrera. Es el precio que había que pagar para tener un sitio de privilegio.

Conforme se llenaban los tendidos de sombra, comenzaban a ocuparse los de sol; presentando una gran entrada cuando a las 19:30 horas arrancaba el paseíllo para los novilleros clasificados.

Serio rostro de Ernesto Lorenzo, de la Escuela de Almería; Fuentes Bocanegra de la de Jaén, y Alberto Donaire por la de Valencia. Eran conscientes de que afrontaban la tarde más importante de sus vidas taurinas. El paseíllo a los sones del Pan y Toros y los sones de este Himno de España, no los olvidarán en su vida.

Apuro

Los nervios propios de esta responsabilidad pesaron en los primeros tercios a Ernesto Lorenzo, quien derrochó voluntad ante un novillo corretón de la ganadería de Buenavista que le hizo pasar más de un apuro. Tras brindar al público, desarrollaba una faena aseada en la zona de tablas, destacando las series por el pitón derecho. Molinetes y desplantes en la fase final terminaron de caldear el ambiente. Sus fallos con los aceros motivaron que fuera silenciado tras dos avisos.

Llegado al cuarto, había que jugársela. Alguno de sus compañeros ya tomaba ventajas, pero nadie quedaba descartado para la consecución del gran título. Por eso Lorenzo tenía que apretar. Así lo hizo en banderillas, esta vez mucho más entonado y que le ponía todo de cara. Con el público muy a favor, se dejaba venir de lejos al astado, luciendo su boyantía y calidad. Un pitón derecho magnífico le permitió desarrollar una faena vistosa. Faltaba un impacto final, y lo quiso hacer con manoletinas ajustadas. Tocaba tirar la moneda, cara o cruz en función de que entrara la espada. Se tiró con determinación, quedándose en la cara y recibiendo un golpe con la testuz. Pero lamentablemente se le escapó la gloria…

Gustó mucho el recibo capotero del cordobés Fuentes Bocanegra, alumno de la Escuela de Jaén, al segundo de la tarde. Lanceó con cadencia a la verónica, rematando con una media marcando los tiempos que dejó sabor. Torea con sumo gusto y clasicismo este torero que viene a recuperar una dinastía. Se lo enroscó con temple por el pitón derecho. Con un poco más de ajuste, su toreo ganaría muchos enteros. Paseó el primer trofeo de la final tras una estocada atravesada.

Tuvo que haber estoqueado al quinto el alumno de la escuela jiennense, pero un error a la hora de soltar al astado hizo que se corriera turno y cerrara el certamen. Sin duda, de forma involuntaria, fue una circunstancia que le favoreció. A esas altura del festejo, y a tenor de las actuaciones de sus compañeros, ya tenía el triunfo en su mano. Pero había que ratificarlo y dejar un buen sabor de boca de cara a su regreso el año que viene. Otra vez se gustó con el capote, ganándole terrenos hasta rematar con la media en el centro del platillo. Ya con la muleta, se encontró con otro buen novillo que le permitió ligar las tandas por ambos pitones, con más profundidad y emoción. El clasicismo gusta a todos los públicos, y así sucedía en este caso. Tenía todo a su favor, pero hasta el rabo todo es toro. Falló con la espada, tónica general del festejo una vez más, y los nervios aparecieron conforme iban sonando los avisos y el toro no caía. Se libró de milagro del escuchar el tercero. Con este sin sabor, se anunciaba que era el vencedor del certamen, por lo que su nombre ya está en los carteles de la Feria de Málaga del próximo año.

La final del certamen de escuelas taurinas de la Feria de Málaga 2022, en imágenes

Ernesto Lorenzo, en La Malagueta. / Gregorio Marrero

Casta

Acusó la falta de fuerza el tercero de la tarde. Y también falta de casta. Le quiso dar su tiempo Alberto Donaire, representante de la Escuela Taurina de Valencia. Haciéndole todo por arriba, toreó a favor del toro. Le fue tapando la salida, ya que el animal tendía a rajarse. Pese a todos estos condicionantes, pudo dejar una grata impresión con un toreo templado por la diestra. Ya en los compases finales se adornó con molinetes y un desplante de rodillas; quedando condicionada la concesión de un posible trofeo a su acierto con la espada. No fue posible.

De improviso, Donaire se encontró que su segundo novillo salía antes de tiempo. Frío, tuvo que coger el capote para medirse a un eral altón con el que los banderilleros encontraron dificultades. No lo puso fácil tampoco con la muleta, desentendido y sin estar nunca entregado al engaño. Con todo, hay que valorar su disposición, como no podía ser de otro modo ante tan gran acontecimiento. Otra vez estuvo desacertado en la suerte suprema.

La corrida

  • Plaza de toros de La Malagueta. Domingo, 21 de agosto.
  • Se lidiaron seis erales de Buenavista. Correctos de presentación y de buen juego en general. Ernesto Lorenzo (E.T. Almería): tres pinchazos, estocada casi entera. (silencio tras dos avisos) y dos pinchazos y estocada (vuelta al ruedo tras aviso). Fuentes Bocanegra (E.T. Jaén): estocada atravesada (oreja tras aviso) y estocada que hace guardia, dos pinchazos, estocada caída, estocada y doce descabellos (ovación tras dos avisos). Álberto Donaire (E.T. Valencia): pinchazo, estocada y once descabellos (silencio tras aviso) y cuatro pinchazos y estocada baja (silencio tras aviso).

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