Teatro

Los cien años del padre de Peneque El Valiente

Miguel Pino, extremeño de nacimiento, malagueño de adopción, vino al mundo en 1923 con una misión: hacer sonreír a los niños - Lo consiguió con su títere, con el que viajó por medio mundo - Diversas actividades y estrenos celebran su vida y su obra - Maestros titiriteros desvelarán sus secretos y estrenarán obras

Los herederos de Miguel Pino, al pie del cañón. | LA OPINIÓN

Los herederos de Miguel Pino, al pie del cañón. | LA OPINIÓN / víctor a gómez. málaga

Víctor A. Gómez

Víctor A. Gómez

Miguel Pino (Villanueva de la Serena, Extremadura, 1923-Málaga, 2010) creó al defensor de todos los niños del mundo, Peneque, en 1958. La historia del títere comenzó en una radio pirata de la localidad, donde hacían un programa en el que los niños cantaban y las marionetas cada día eran más protagonistas del espectáculo. Fue entonces cuando Miguel se dio cuenta de «la fuerza que tenían aquellos personajes» y decidió iniciar una gira por diferentes pueblos de España. En ese momento, emprendió un viaje solo con sus muñecos, su mujer y una maleta, y «sin una peseta», pero «con mucha ilusión». Este 2023 se celebrará el centenario del nacimiento de Pino por todo lo alto, con el estreno de una función, Peneque cien por cien valiente, y conferencias teatralizadas a cargo de maestros titiriteros, que mostrarán, además, su trabajo en tres espectáculos.

Cuentan que el primer títere de Miguel Pino fue una calabaza. En realidad, fue antes su primer juguete, a modo de sonajero, que con él inició su primer diálogo con objetos, y realizó el descubrimiento que marcaría su vida: todos los que le rodean sonríen cuando el agita su pequeña calabaza. De ahí que aquel fruto convertido en títere sea uno de los protagonistas de Peneque, cien por cien valiente, una historia que desvela «los caminos y secretos de un titiritero», según el hijo de Pino, Antonio, que ha continuado el legado del extremeño. La obra se estrena este mismo domingo, en el Centro Cultural María Victoria Atencia.

Paco Paricio, de Titiriteros de Binéfar y Eva Serna, de La Gotera de Lazotea, expondrán en las conferencias tituladas Cómo hago títeres y Protagonistas femeninas en los títeres y en los cuentos populares, respectivamente, algunas de las claves de un oficio, el de hacer reír y pensar a los más pequeños gracias a las peripecias de unos muñecos, que sigue plenamente vigente. Además, Gaspare Nasuto ofrecerá la ponencia teatralizada La Dolmus di Pulcinella. Aparte del estreno de Peneque, cien por cien valiente, habrá otras tres actuaciones para los espectadores: En la boca del lobo, de Titiriteros de Binéfar; La mata de albahaca, de La Gotera de Lazotea y Pulcinella di Mare, a cargo de Gaspare Nasuto. Entre el 17 y el 19 de febrero, se cumplirá una vez más el deseo de Miguel del Pino: «Las marionetas llevan cada día la ilusión a los niños».

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Miguel Pino falleció tranquilo porque, como dijo, el hecho de que sus hijos hayan continuado la tradición titiritera le satisfacía enormememnte. Producciones Infantiles Miguel Pino continúa gracias a sus hijos Antonio y Miguel, quien junto a Isabel Hurtado, la mujer de Antonio, siguen llevando a gala el ser «la primera vez en el teatro» de muchos niños. Seguro que al final de cada función Miguel Pino padre, el creador de Peneque, aplaude sonriendo.