´Pelotazo´ de Álvaro Quirós

Lo hizo. El gaditano Álvaro Quirós (-19) ganó ayer el Qatar Masters, su tercera victoria en el circuito europeo con 26 años recién cumplidos. En todo caso, lo de ayer fueron palabras mayores. El triunfo confirma la gigante dimensión de este jugador a día de hoy, y deja entrever lo que puede venir en el futuro próximo.

Su majestuosa victoria en Doha mete a Quirós de lleno en el Masters de Augusta, y muy probablemente en el resto de los ´majors´ del año, además de los WGC, empezando por el Accenture Match Play de finales de febrero, porque el ´muchachito´ se va a colocar entre los treinta mejores del mundo.

Quirós libró una dura lucha en la vuelta del recorrido con el sudafricano Louis Oosthuizen y el sueco Henrik Stenson para entregar finalmente una tarjeta de 269 golpes para los cuatro días y superar por tres a sus rivales.

Stensson, campeón de Doha en 2006 y segundo en 2007, tomó el mando con un ´eagle´ en el hoyo 10, pero Quirós pudo recuperarse y mantenerse en la lucha en el campo de par 72. Un ´bogey´ del español en el 15 volvió a darle el control de las acciones a Stenson, mientras Oosthuizen se despegaba del grupo.

Quirós reaccionó con dos ´birdies´ en los hoyos finales y, con 69 golpes, celebró su tercer título en el circuito europeo, tras los logrados en 2007 en el Dunhill Championships y en 2008 en el Abierto de Portugal.

Líder del circuito europeo en distancia con el ´driver´, el gaditano, una de las principales esperanzas del golf español, celebró la victoria con sus compañeros que le esperaron en el ´green´ del 18 para verle ganar. Cumpliendo con la tradición, el resto de los españoles tiraron al lago a Quirós y a su ´caddie´, por lo que el jugador fue a la sala de prensa empapado.

Por cierto, ¿vieron la ´miradita´ que le dedicó de Sergio García? Lo dicho, Quirós apunta muy buenas maneras y quizá Sergio ve un rival de ´caché´ en su amigo. Sergio terminó séptimo y empatado con Gonzalo Fernández-Castaño con -11 y Miguel Ángel Jiménez, quinto con -12.

"Estoy contentísimo y muy satisfecho por cómo me he desenvuelto en una última vuelta sin darle bien a la bola. Hoy -por ayer- me he debido levantar con el pie izquierdo. No empecé muy nervioso, pero era la típica situación en la que sabía que iba a tener que pelear porque no le estaba dando tan sólido como la semana pasada. Me salvó el ´putt´, metí varios en momentos claves, los del hoyo nueve y el diez me dieron la vida. Parecía que me había alejado del torneo. Mi objetivo para estas tres semanas era meterme entre los 64 primeros del mundo", dijo ayer el campeón.