Es imposible hablar de balonmano femenino en Málaga sin que surjan los nombres de Carmen Morales, presidenta del Balonmano Málaga Costa del Sol, y de Diego Carrasco, técnico del equipo. Carrasco lleva 19 años ligado al club, siendo primer entrenador los 14 últimos. Ha vivido de todo: ascensos, descensos, permanencias, épocas mejores y esta crisis económica que últimamente ha obligado a la entidad a reinventarse, sin perder poderío deportivo, como muestra su presencia este fin de semana en Logroño, en la Fase de Ascenso, o con los equipos de base también triunfando por todo el territorio nacional. Diego está ilusionado ante este nuevo reto en Logroño.

¿Cómo llegan las chicas a este fin de semana en el que está en juego la primera parte del ascenso?

Tanto a nivel físico como mental están muy fuertes. Las tres semanas que han pasado desde que acabó la temporada se han hecho un poco largas. Están ansiosas ya por empezar a jugar y por estar en la competición.

¿Cuál es el objetivo con el que viaja el Asisa Málaga Costa del Sol a La Rioja?

Está claro que no somos favoritos. Vamos con máximo respeto a todos los rivales, pero sin miedo a ninguno. Nuestro objetivo es una de las dos primeras plazas para estar el 17 de mayo en la lucha final por el ascenso con las dos primeras del otro grupo, que juega en Oviedo.

Hay un rival riojano, uno asturiano y otro de Castellón. ¿Dónde está el mayor peligro?

El equipo de Logroño por tener el factor cancha, puede ser bastante peligroso. Castellón es de los típicos equipos que siempre van de tapado y luego te hacen mucho daño en la competición. Y el Gijón, por los resultados de la primera fase y por el nivel de plantilla y presupuesto, está claro que es el rival a batir.