El malagueño Adrián Albuera obtiene 2 platas en el campeonato de motos de agua de España y Andalucía

El malagueño Adrián Albuera consiguió obtener 2 segundas posiciones en la primera prueba del Campeonato de motos de agua en España y segunda prueba del Campeonato Andaluz celebrado en Nerja. Albuera obtuvo sus triunfos en las categorías GP4 y GP2 Promoción.

El piloto malagueño, en declaraciones a La Opinión de Málaga, se mostró satisfecho con su rendimiento en la competición, aunque mostro su deseo de seguir mejorando. "El objetivo es ganar los 2 campeonatos" afirma Albuera, que con estos resultados mantiene la 1º posición en el andaluz y se coloca segundo en el nacional.

Albuera explica que desde la pole hasta el final de las 3 mangas mantuvo la segunda posición, excepto en un momento en el que cayó a la tercera posición y tuvo que verse obligado a remontar, algo muy difícil de lograr en una carrera de motos acuáticas. "Las sensaciones son muy buenas. Cada manga me acercaba más al líder de la carrera. Me voy con un buen sabor de boca".

El segundo puesto en GP2 Promoción tiene aún más mérito al ser la primera vez que el joven compite con una moto acuática de tanta potencia. "Apenas había entrenado un par de horas con ese tipo de moto antes de competir en el torneó" confiesa a La Opinión de Málaga. Las motos de GP2 Promotion se caracterizan por tener una mayor cantidad de caballos de potencia, y por tanto, permite alcanzar velocidades puntas más altas.

Los Campeonatos de España y Andalucía no son los únicos retos que tiene por delante el piloto malagueño. Albuera aún tiene que disputar la segunda carrera del Campeonato Mundial de Motonáutica, que se celebrará en la ciudad italiana de Olbia en septiembre de este año. El malagueño solo pudo alcanzar la sexta posición en la primera vuelta celebrada en Ibiza, pero muestra confianza en hacer un gran papel en aguas italianas.

El piloto mostró su orgullo por representar a Málaga a nivel autonómico, nacional e internacional. Albuera aseguró que siempre va acompañado de la bandera de su ciudad a todas las competiciones, a la que califica como "la mejor ciudad del mundo". El piloto expresó su convicción de ser "un malagueño de pura cepa" y afirmó que no existe ningún otro lugar en el mundo mejor para vivir.