Conciliación

La RFEF acuerda un plan de conciliación familiar con las capitanas de la Selección Femenina durante el Mundial

La Federación desarrolla un plan en el que se destina un fondo económico de ayuda para el desplazamiento de familiares directos y articula medidas para que las jugadoras madres compartan tiempo diario de calidad con sus hijos/as durante la concentración mundialista

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rfef / RFEF

Redacción

Las capitanas de la Selección Española de Fútbol Femenino, Ivana Andrés, Irene Guerrero y Esther González han firmado en representación de todas sus compañeras el acuerdo con el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, que establece las medidas de conciliación familiar que regirán la estancia de las jugadoras en Australia y Nueva Zelanda.  

En concreto, se favorecerá y articulará el desplazamiento de familiares directos de las jugadoras para acompañarlas durante el campeonato y se facilitará que las jugadoras con hijos e hijas menores de dos años puedan tenerlos cerca.  

El acuerdo, rubricado en el día de hoy pero que fue alcanzado el pasado 16 de mayo, se convierte en un referente del mundo del fútbol, incorporando medidas de conciliación que siguen el modelo de otras selecciones nacionales. La RFEF ha hecho un esfuerzo suplementario con el fin de proporcionar las mejores condiciones posibles a las futbolistas, y encontrar las mejores soluciones para que las jugadoras reciban el apoyo de su círculo más cercano durante el campeonato.   

Cabe destacar, además, que las medidas se enmarcan en la política de equiparación de condiciones relativas entre las selecciones masculina y femenina, como en su momento ya se acordó con las capitanas de la Selección de cara a la última Eurocopa.  

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En virtud de lo firmado, las jugadoras que tengan hijos/as menores de 2 años tendrán la opción de que sus parejas/cuidadores y los niños/as puedan estar cerca de la jugadora durante toda la concentración en Nueva Zelanda y Australia, para que puedan disponer de un tiempo suficiente de conciliación los días de la concentración.  

Por otro lado, la RFEF pondrá los medios para que los familiares directos de las jugadoras puedan viajar a Nueva Zelanda y Australia durante el torneo, incluyendo los días de partido, para así poder compartir momentos con ellas.